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"Este es un resultado soñado" Técnico y jugadores se muestran prudentes, pero muy satisfechos con el marcador

Diego Torres

Entre la prudencia y la tentación del festejo salieron del vestuario los jugadores del Madrid después de dominar y vencer al Bayern de Múnich. Arrastrando los pies por el cansancio, y haciendo cuentas sobre el número de partidos que hace falta jugar antes de acabar con una temporada que para muchos se ha convertido en un suplicio agridulce. "Tengo un dolor horrible en el pie", se lamentó un engominado Morientes, que arrastra una artritis en el dedo gordo del pie derecho. "Nos quedan cinco partidos y terminamos", evaluó Roberto Carlos, sumando tres de Liga e -inconscientemente- dos de Liga de Campeones, con lo que el brasileño se dio por seguro en la final de París. Luego, Roberto Carlos pidió prudencia, al igual que Redodno, Savio, Helguera y su entrenador, Vicente Del Bosque. El técnico se deslizó para admitir que el resultado es "soñado". Pero junto a él, todos emitieron la misma máxima: "Para llegar a París nos queda un partido".Ayer, Del Bosque volvió a poner a sus tres delanteros en una misma alineación. Es decir, formó el equipo con un tridente, palabra que el técnico madridista procura evitar. O mejor, colocó a Raúl en la media punta, con dos delanteros por delante, incluido el maltrecho Morientes, de quien el jefe de los servicios médicos del Madrid, Alfonso Del Corral, se pasó diciendo toda la semana que sería "imposible" que jugase. Pero así y todo, con su artrosis y un pie inflamado, Morientes se metió en el equipo. Y hasta tuvo la oportunidad de marcar un gol en fuera de juego. El árbitro lo anuló.

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Esta formación, con Raúl, Morientes y Anelka, habla de las preferencias y el coraje de Del Bosque. En primer lugar, habla de su coraje, aunque ayer, tras el partido, él se limitó a decir que no tuvo más remedio que formar a su equipo como lo hizo. Apuntó que lo suyo no fue valor, sino necesidad: "Cualquier entrenador debe apostar por los mejores jugadores de que dispone en la plantilla", se explicó.

En todo caso, cuando el Bayern derrotó al Madrid en febrero, a Del Bosque le llovieron críticas por desequilibrar al equipo jugando con tres delanteros natos contra un rival tan contragolpeador. Para no dejarse sorprender, esta vez Del Bosque metió a Helguera de líbero. "Ahora hemos defendido mejor, esa es la clave", destacó.

La elección de esos tres delanteros también habla de las preferencias del técnico. Del Bosque evidenció que prefiere a Raúl como jugador suelto por detrás de los puntas que a un presunto especialista como Balic. "Balic no es un jugador de banda", aseguró antes del partido, descartando la posibilidad de que sustituya al lesionado Savio en el extremo izquierda. Al final, Balic no fue ni titular. Antes de hacer experimentos, Del Bosque puso a Raúl de comodín donde le falta un especialista: sin Guti, el Madrid no tiene media punta, pero ayer Raúl respondió como un diplomado en las artes del 10. Aportó el último pase para servir los dos goles del Madrid, tuvo llegada, y recorrió toda la medular manejando los tiempos del partido junto a Redondo.

Paulo Sergio, el extremo derecho brasileño del Bayern, salió gesticulando con pesar de la ducha. Él se libró de toda culpa y consideró que la ausencia de Effemberg fue la causante de la mala actuación del equipo bávaro: "El principal problema que hoy tuvimos los delanteros fue que no recibimos balones. Ese fue un problema del Bayern. No hubo un hombre que diera consistencia al centro del campo, que metiera balones en condiciones a los delanteros. El Madrid que me he encontrado ha sido el mismo que en febrero. Lo que ha cambiado es el Bayern, nosotros hemos jugado peor". Ésta no fue la opinión de Del Bosque. El entrenador madridista replicó que la ausencia de Effemberg fue ayer irrelevante. Dijo que el Madrid ganó porque defendió mejor: "En el anterior partido que disputamos en el Bernabéu no jugamos mal, pero esto no significa que hayamos defendido bien. La clave del resultado de hoy ha sido lo bien que hemos defendido. Los siete que jugaron por detrás del balón estuvieron magníficos, jugaron con mucha intensidad, con la ayuda de Raúl, que iniciaba la presión desde arriba".

El entrenador del Bayern, Ottmar Hitzfeld, lamentó la falta de su capitán: "Claro que echamos de menos a Effenberg. Sin él nos faltó sustancia balompédica, porque es un jugador muy importante y muy creativo. Pero nosotros sabíamos que no iba a jugar y que otros debían suplir sus aptitudes. El Madrid fue mejor equipo y debemos mejorar mucho si queremos tener una oportunidad de darle la vuelta a la eliminatoria en Múnich".

Iván Helguera consideró que el Bayern se equivocó al no jugar con dos extremos y un punta: "Paulo Sergio es un gran extremo pero al jugar junto con Elber arriba se entorpecen mucho. Ocupan el mismo lugar y se estorban. Elber se siente mejor cuando es la única referencia y eso se nota. En febrero, el Bayern nos atacó con tres puntas y nos hizo mucho más daño".

"Este es un resultado ideal, soñado", se deleitó Del Bosque, con su permanente ceño fruncido. Luego retomó su severidad y su prudencia: "Pero hay que ser realista, porque esta eliminatoria tiene dos partidos y así como hoy hemos sido mejores que el rival la semana que viene el Bayern nos puede superar en su campo".

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Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

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