'OVERBOOKING' EN BARAJAS "Después de reservar el billete, me dejan en tierra"

"Estoy nerviosísima. Jamás creí que me ocurriría esto a mí, después de que reservé el billete con mucho tiempo y lo pagué con la propia tarjeta de Iberia, me dejan en tierra". Así se expresaba ayer Paloma Álvarez, una pasajera que no pudo volar de Madrid a Jerez de la Frontera, donde la esperaba su esposo. En sus brazos no paraba de enredar Luis, su retoño de 20 meses. Paloma sufrió, como otros muchos clientes del aeropuerto madrileño, las consecuencias de la sobreventa de billetes. Adquirió su asiento en el avión y pensó que incluía la tarjeta de embarque. Su sorpresa llegó cuando en el mostrador de facturación le dijeron que el vuelo a Jerez estaba completo y que no podría volar hasta el día siguiente a la ciudad andaluza. Su marido había partido ya con todo el equipaje para recogerla a su hijo y a ella en el aeropuerto de Jerez. "La única solución que me dan es que vuele a Sevilla y que allí me recoja mi marido. Ahora me toca tragarme 200 kilómetros con el niño, que es precisamente lo que quería evitar", explicaba Paloma.Peor situación vivió una treintena de pasajeros de Bilbao que llegó con una hora de retraso a Barajas. No pudieron enlazar con un avión que les iba a trasladar a La Habana, por lo que les tocará esperar hasta el mediodía de hoy para ir a la capital cubana. "Estoy seguro que han provocado el retraso en Bilbao porque sabían que el vuelo estaría saturado y que no íbamos a entrar en el avión. Ahora sí, acabamos de perder un día de nuestras vacaciones", señaló Pilar Mintegi, otra afectada por la sobreventa de billetes.

Igual les ocurrió a un grupo de unas 20 personas procedente de Asturias. Un pasajero planteó el mismo caso que Mintegi, con "el agravante" de que, según su versión, una responsable política de su región sí pudo coger el vuelo de Iberia para Miami. "Ha subido al avión y ahora está volando para Estados Unidos, mientras nosotros tenemos que hacer noche en Madrid por el retraso a propósito de nuestro vuelo", señaló el pasajero.

Los afectados por la sobreventa de billetes pueden reclamar a la compañía aérea que les indemnice por los perjuicios causados, según la normativa europea.

El pasajero podrá reclamar el reembolso del precio del billete correspondiente a la parte del viaje no efectuada, la conducción lo más rápidamente posible hasta el destino final o volar en la fecha que más le convenga. Con independencia de los casos anteriores, el transportista deberá indemnizar con 150 euros (25.000 pesetas) si el vuelo no supera los 3.500 kilómetros. Si la distancia es mayor, la indemnización se duplica (50.000 pesetas). Si el transportista lleva al pasajero en un tiempo menor de cuatro horas, la indemnización se reduce al 50%.