Dirigentes del PSOE instan a evitar el reparto de poder entre 'familias'

Los dirigentes del PSOE de diferentes ámbitos empiezan a perfilar fórmulas para la búsqueda de un secretario general y una ejecutiva que permitan a todos los militantes opinar y participar para superar el esquema clásico de toma de decisiones a cargo de los barones y con la presión de las distintas tendencias, sensibilidades o familias. En esta línea coincidieron ayer el presidente de la comisión política, Manuel Chaves, y el secretario general de los socialistas extremeños, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, aunque con diferencias en el método.

Chaves propugna la elección por separado del secretario general y de la ejecutiva en tanto que Ibarra apuesta porque se formen "equipos" que presenten a los militantes sus proyectos para el partido y para la sociedad y que, al final, se sometan a votación en el congreso. El presidente extremeño entregó a Chaves, para que la estudie la comisión política, la propuesta aprobada el lunes por el comité regional del PSOE de Extremadura sobre la elección de la dirección socialista. Ese documento será remitido hoy mismo a todas las federaciones del partido para su estudio y debate. Después de esa conversación Chaves declaró que va a proponer a la comisión política "una serie de innovaciones" estatutarias por las cuales el congreso del partido elegirá en procesos diferentes al secretario general y a la ejecutiva.Se trata de evitar "los condicionantes del reparto territorial y de tendencias" que han pesado en ocasiones anteriores. Eso sí la ejecutiva que surja del congreso debe conformar un "equipo homogéneo en tanto que la integración territorial y de tendencias debe quedar para la composición del comité federal". Personas de la confianza de Chaves han empezado a trabajar en la fórmula concreta que integrará en la ponencia-marco y someterá a debate en la comisión política el 3 de mayo. Antes de que esta gestora reúna al comité federal el 13 de mayo recibirá otras iniciativas sobre la fórmula de elección de la ejecutiva que adoptarán la forma de enmiendas si es que no son integradas en la ponencia de la comisión política.

La propuesta de la federación extremeña apuesta también por prescindir de etiquetas y barones. "Si volvemos otra vez al reparto de poder orgánico iremos al fracaso", señaló Rodríguez Ibarra, quien reconoció que anteriormente se hizo así porque tenían "un líder, Felipe González, y un proyecto". "Ahora no tenemos ni una cosa ni otra; y si no hemos encontrado a ese líder indiscutible, a ese mirlo blanco, no lo vamos a encontrar para el congreso de julio, porque no existe". Su conclusión es que su partido debe "ir por otro camino".

Su propuesta es muy participativa y se asemeja al proceso de primarias que él descarta, como casi todos, para la elección del secretario general, si bien las acepta en principio para el candidato a la presidencia del Gobierno. Ibarra propone abrir un plazo de presentación de "equipos de militantes", entre cinco y diez personas, que articulen un proyecto de dirección y actuación política. Las agrupaciones locales, 15 días antes del congreso, votarían los proyectos y los equipos que previamente habrán podido hacer campañas explicativas. Se proclamaría a los equipos que hayan obtenido, al menos, el 30% de los votos de los afiliados. Estos equipos expondrán ante los delegados del congreso sus alternativas para ser votados a continuación de manera individual y secreta. Con este esquema el PSOE tendría ya un primer núcleo de dirigentes, es decir, de miembros de la ejecutiva federal, que se completarán con otros afiliados de provincias que en las últimas elecciones generales hayan superado en cinco puntos la media del resultado socialista a nivel nacional. Y así en orden descendente en torno a los resultados electorales.