Antic: "Hemos jugado bien" Los jugadores del Atlético reconocen sus errores, y Kiko rechaza el saludo del técnico

El Atlético perdió su tercer partido consecutivo y ya desciende por un abismo y sin paracaídas hacia la Segunda División. Los gestos de desasosiego se multiplicaron por todo el vestuario después del partido. Y desde el campo, cuando Antic ordenó el cambio de Kiko por Correa. El jerezano abandonó la cancha sin sentarse en el banquillo. Pasó por delante de Antic, que le tendió su mano, y la rechazó. El serbio, que se envolvió en una gabardina negra, le buscó el brazo para forzar un gesto afectuoso pero Kiko siguió de largo hacia la ducha, con el rostro descompuesto. En la grada que apunta hacia el oeste, los Riazor Blues bramaban ante la contemplación de otro cambio, desarrollado con más alegría: "¡Turu-Turu-Turu Flores!".Antic obvió reflexiones fatalistas pero bastaba con verle la cara. Abotargado, sus ojos se rasgaban aún más. Elogió a su equipo por el juego realizado pero criticó errores que costaron caros: "Desde principio a fin hemos jugado al fútbol, parece paradójico pero para mí hemos jugado bien. Lo que ocurre es que fuimos ingenuos en momentos puntuales". Esos momentos se centran principalmente en las jugadas a balón parado, como la del primer gol: "Da rabia porque ha sido una jugada prevista, preparada y entrenada. Pero Gamarra se resbaló y el rival se aprovechó".

Nadie, ni siquiera uno que fuerza el optimismo, como Antic, se atrevió a negar que después del partido de ayer el Atlético está encaminado hacia Segunda, casi inevitablemente. "Seguro que no nos vamos a rendir con facilidad", se limitó a asegurar. Su colega, Javier Irureta, apareció tan lanzado en la sala de prensa como Makaay en el césped: "Somos un equipo que si nos dan espacios hacemos daño con Víctor, Makaay y el Turu. Y esta noche el Atlético nos ha dado espacios". El título de Liga va tomando forma en A Coruña, sobre todo después de visitar al Camp Nou, como recordó Irureta: "Después de perder en Barcelona hemos ganado tres partidos de tres y hemos marcado diez goles. Estamos en racha y hemos dado un paso muy importante hacia el título".

El delantero holandés Roy Makaay, que suma 19 goles en esta Liga, se llevó el balón con que se jugó el partido metido en un macuto. Dijo que no notó nada raro en la defensa del Atlético, y que no le dejaron hacer con tanta facilidad: "Santi me dio tres hostias terribles". El propio Santi se marchó al autobús entre maldiciones y un potente sentimiento de culpa, como recogió Onda Cero: "Hemos perdido el partido por unos errores de los cuales me siento el máximo responsable". Baraja llevaba estampado el escudo del Atlético en la cara, en forma de ojeras y palidez. El canterano, que salió a sustituir a Bejbl en el segundo tiempo sufrió como pocos la derrota: "¡Pero si habíamos ensayado las jugadas a balón parado! ¡Cómo puede ser que nos hagan un gol así! ¡Tres goles en diez minutos!".