Detenidas seis personas por el secuestro de un abogado

La policía ha detenido a seis personas como presuntos autores del secuestro de un abogado barcelonés en unas céntricas oficinas durante horas, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía. Los supuestos secuestradores trataban de obtener entre 50 y 80 millones de pesetas y los ingresos de una línea telefónica 906 para consultas del tarot, a cuyo titular representaba el letrado. Los supuestos secuestradores maltrataron al letrado mientras estaba maniatado y amordazado en unas oficinas de la plaza de Callao, número 4.Los detenidos son Rosario F. H., de 40 años; su hijo Carlos H. F., de 23; Virginia A. R., de 33; Javier Alfredo E. C., de 24; Ángel León R. T., de 35, y Francisco Javier G. V., de 51.

El abogado Miguel J. M. llegó el pasado miércoles a Madrid por encargo de la empresa Cibeles Centro Negocio, con sede en Barcelona, y cuyo objeto social es la explotación de una línea 906 para consultas del tarot. Al frente de la empresa figuraba una de las detenidas, Rosario F. H., que se había hecho cargo de la explotación de la línea telefónica.

El abogado llegó a Madrid con el encargo de alcanzar un acuerdo con Rosario y la presunta encargada de la compañía, Virginia A. Se reunió con ellas en la mañana del miércoles, tras lo que decidieron mantener una segunda reunión por la tarde. El letrado entró acompañado de Virginia en el despacho de la delegación, situado en unas oficinas de la plaza de Callao. Allí le esperaban Rosario y su hijo.

El abogado hablaba por su teléfono móvil con una mujer cuando se dio cuenta de que alguien le atacaba por la espalda. Se trataba de Ángel León, que intentaba amordazarle con una cinta aislante. Tras un forcejeo, el letrado fue arrojado al suelo y maniatado. Con la ayuda de otros dos supuestos miembros de la banda, Javier Alfredo y Francisco Javier, le arrebataron 120.000 pesetas y varias tarjetas de crédito. Amenazaron con matarle. Según la policía, la banda quería más: entre 50 y 80 millones, así como la línea 906.

Ruidos extraños

La mujer con la que hablaba por teléfono el abogado en el momento de la agresión avisó a la policía e informó de la dirección en la que debía encontrarse la víctima en ese momento. Los agentes acudieron al lugar. Un empleado les abrió la puerta y aseguró que no ocurría nada. Pero unos ruidos extraños procedentes de un despacho alertaron a los agentes, que finalmente hallaron al letrado con golpes en la cara. Antes, al oír a los agentes, los presuntos secuestradores le quitaron las ataduras y la mordaza.

La víctima declaró que había sido secuestrada, por lo que los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía procedieron a detener a las seis personas. A éstas, que carecen de antecedentes, se les considera ahora presuntos autores de detención ilegal y lesiones.