Medio Ambiente prohíbe usar agua de pozos para el complejo invernal Xanadú

Xanadú, el mayor complejo de nieve artificial de Europa que promueve la Consejería de Obras Públicas y la empresa británica Ace Snowmake en el municipio de Arroyomolinos, se alimentará únicamente del agua de los embalses del Canal de Isabel II. La Consejería de Medio Ambiente ha prohibido a los promotores de esta iniciativa extraer agua del subsuelo y sólo permitirá que fabriquen la nieve que necesitan utilizando el agua, más cara, que distribuye el Canal. Xanadú, cuyas obras estarán concluidas en 2002, ocupará 95 hectáreas, contará con tres pistas de nieve artificial y albergará comercios, restaurantes, cines, piscinas, hoteles y 13.000 plazas de aparcamiento. Se ubicará a 25 kilómetros de Madrid, su presupuesto es de 30.000 millones y empleará a 4.000 personas. Ignacio López-Galiacho, director general de Calidad Ambiental, manifestó ayer: "Como el agua que consumirán las instalaciones es pequeña, preferimos que proceda del Canal y que no se toquen los acuíferos". Obras Públicas siempre ha mantenido que el consumo de agua de las instalaciones será mínimo, porque se reciclará. Calculan que las pistas consumirán unos 20 metros cúbicos al día, lo que equivale al gasto de sólo 80 personas.

López-Galiacho recordó ayer que las instalaciones no necesitan declaración de impacto ambiental, tal y como reclaman los ecologistas, porque se levantarán en suelo urbanizable. "Lo que sí se llevará a cabo es un procedimiento de calificación ambiental, un trámite semejante a una declaración de impacto, pero que no se somete a información pública". Esta calificación establecerá medidas correctoras -de obligado cumplimiento- para reducir el impacto de las instalaciones.