Un 10% de los votantes del PSOE en 1996 se pasó al PP

Culpar a la abstención del descenso de 1,6 millones de votos que sufrió el PSOE en las elecciones del 12-M es, según la empresa de sondeos Gallup, un análisis simplista y erróneo. Hubo mucha más abstención que en 1996, siete puntos más, pero ésta afectó a todos los grupos y no sólo al PSOE. La abstención es sólo uno de los elementos que explican esa caída. Otro, y también muy relevante, es la transferencia de votantes que depositaron su confianza en el PSOE o en IU en 1996 y que han optado por el PP esta vez. Además, un segmento del electorado de ambos partidos en 1996 ha preferido esta vez apoyar a formaciones nacionalistas de izquierda, como el Bloque Nacionalista Galego o la Chunta Aragonesista. Y no faltan quienes han optado por el voto blanco o nulo. Los jóvenes votantes, aquellos que no habían cumplido 18 años en 1996, también han preferido al PP antes que al PSOE, aunque su opción mayoritaria sigue siendo la abstención: cuatro de cada 10 no acudieron a las urnas, mientras que un 22% optó por el PP y un 18%, por el PSOE. En cifras aproximadas, y siempre según Gallup, ocho de cada diez votantes del PP en 1996 se mantuvieron fieles a ese partido el 12-M, mientras que poco más de seis de cada diez electores del PSOE volvieron a votarle. Y sólo un tercio de quienes apostaron por IU se mostraron dispuestos a reincidir el 12-M. Para dar la razón a Mariano Rajoy cuando afirmó que los votos ya no son de nadie, uno de cada 10 votantes del PSOE en 1996 decidió pasarse esta vez al PP, y 1,5 de cada diez del IU asumió la pinza y también respaldó al PP. La transferencia de voto desde el PP hacia el PSOE es mucho menores (no llega al 5%) y prácticamente nula hacia IU.

Estos análisis de Gallup se basan en un sondeo realizado el 10 de marzo, dos días antes de las elecciones, en unas fechas en las que no estaba permitida la difusión de pronósticos electorales. El presidente de esta empresa, Julián Santamaría, pronostica que su previsión de transferencia de voto diferirá poco de lo que resulte del sondeo poselectoral que tradicionalmente realiza el CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas) y que todavía no está disponible. Alega a su favor que Gallup fue la única empresa que pronosticó la mayoría absoluta del PP en la noche electoral, a través de una encuesta que fue difundida por la televisión autonómica andaluza.

El trabajo de Gallup analiza también la composición del 30% del electorado que no acudió a votar el pasado día 12. El abstencionismo tiene un club de seguidores muy estable: el 75% de quienes no acudieron a votar el pasado día 12 tampoco lo hicieron hace cuatro años. Pero el PP convenció de que acudieran a votarle un 10% de antiguos abtencionistas. Con estos datos se explica, según Santamaría, que el PP aumentase sus votos en términos absolutos pese a la menor participación.