"El objetivo no debe ser la victoria a toda costa, sino prepararnos mejor"

Manuel Chaves se ha convertido en el dirigente más influyente en el seno del PSOE, no sólo porque es de los que sigue ganando elecciones, sino porque no aspira a convertirse en el ganador del proceso que va a conducir.Pregunta. La renovación a fondo que no consiguieron fraguar en cuatro años ¿van a tener que hacerla ahora en cuatro meses?

Respuesta. La responsabilidad de la Comisión Política es preparar las condiciones para que la renovación sea posible y sea afrontada por el congreso del partido, que va a tener que tomar las decisiones más trascendentales a las que se ha enfrentado un congreso del PSOE en los últimos 20 años. Los resultados de las elecciones nos han puesto frente a nuestra propia responsabilidad: nos hemos equivocado, hemos practicado el autismo respecto a la sociedad y no nos hemos renovado suficientemente. Ahora, hay que renovar las personas y las propuestas.

P. El deslizamiento desde el debate sobre el ajuste político hacia el ajuste de cuentas ¿ha terminado, tras quedar aprobada la convocatoria de un congreso ordinario, o va a continuar?

R. Lo que temíamos, un comité federal de catarsis, no se produjo. Es verdad que algunos trataron de ajustar cuentas, pero no fue ésa la actitud de la mayoría, y en esta actitud positiva incluiría a guerristas, borrellistas e Izquierda Socialista. He utilizado estas etiquetas pero también es necesario que las vayamos abandonando. La Comisión Política va a trabajar para restaurar la confianza entre todos los militantes y para transmitir tranquilidad a nuestros votantes.

P. ¿Le gustaría ofrecer al congreso del PSOE un consenso bastante elaborado sobre un candidato a secretario general, o prefiere que en ese congreso se pueda escoger entre varios candidatos?

R. Me conformo con que cuando terminemos nuestra tarea la gente diga que fuimos claros, limpios y neutrales. No es responsabilidad de esta Comisión Política conformar un proyecto de ejecutiva federal en torno a un candidato a secretario general.

P. ¿Percibe que va a haber un único candidato o que va a haber varios?

R. Mi deseo es que haya varios. No es que lo vislumbre, sino que no lo descarto.

P. ¿El próximo secretario general debería ser a la vez candidato a la presidencia del Gobierno?

R. Sería lo más lógico y positivo, porque acarrea muchos menos problemas de los que nos ha mostrado la experiencia reciente.

P. ¿Le parece asumible tener un líder electoral que no forme parte del Parlamento?

R. Condiciona mucho no estar en el Congreso, pero no es un elemento determinante cuando se trata de escoger un liderazgo.

P. ¿Cómo ve los movimientos que ha iniciado José Bono para situarse en la carrera hacia la secretaría general?

R. Creo que José Bono es un buen candidato, pero pueden surgir otros.

P. Almunia animó en su momento a Borrell a que se presentase a las primarias, que luego le ganó. ¿Anima usted ahora a Borrell para que se presente a la elección de secretario general?

R. Es una decisión que sólo le corresponde a él, y en la que no quiero entrar.

P. ¿Cuál debería ser el papel reservado a las primarias?

R. Se ha creado una especie de mística en torno a las primarias, como si fuera el elemento de renovación del partido, lo que nos va resolver los problemas. No es así, y no ha sido así.

P. A veces da la sensación de que ustedes tienen mucho más clara la necesidad de renovarse que cómo hacerlo.

R. Hay capacidad para hacerlo. Muchas veces hemos confundido lo que es renovarse y lo que es renovar las caras, y también hemos confundido renovación con relevo generacional. No por tener menos edad se tiene más creatividad o capacidad política. Para renovarse hay que detectar los cambios sociales que se han producido en España, delante de nuestros ojos y sin habernos dado cuenta; y hay que cambiar la cultura de la organización, con algo que hemos dicho pero no hemos hecho: contrastar continuamente con la sociedad nuestras propuestas políticas.

P. Felipe González tardó ocho años en ganar las elecciones y Aznar, siete. ¿Qué razones ve para que ustedes vayan a conseguirlo ahora en menos tiempo?

R. La travesía puede ser corta o larga, depende de si somos capaces de superar los retos de los que antes hemos hablado. El objetivo no debe ser perseguir la victoria electoral a toda costa, sino prepararnos mejor, y eso pasa por una reflexión todo lo serena y tranquila que haga falta. Hay una nueva etapa y, por tanto, hay que hacer una nueva oferta que apunte bien al futuro y represente con acierto el cambio que ofrecemos respecto al PP.

P. La riada de los resultados electorales ¿se ha llevado consigo el pacto con Izquierda Unida?

R. El congreso tendrá que hacer una reflexión muy seria sobre lo que ha representado ese pacto. En mi opinión, desde el punto de vista electoral, no ha representado absolutamente nada.

P. ¿Irá usted a las consultas del Rey para encargar la formación de Gobierno?

R. Es una posibilidad.

P. ¿Cómo lleva que Javier Arenas diga que la derrota del PSOE no es para tanto?

R. Las declaraciones que hacen ahora los dirigentes del PP no me van a engañar: van a hacer con la mayoría absoluta lo que no pudieron hacer en estos cuatro años. Van a tratar de golpear mucho más fuerte, con mano de hierro en guante de seda.