El PNV pide que socialistas y populares hagan público su 'pacto de gobierno' en las Juntas Generales de Álava

El portavoz del PNV en las Juntas Generales de Álava, Félix Ormazabal, exigió ayer al PP y al PSE que "dejen de fingir" y hagan público lo que entiende como un acuerdo total de gobierno suscrito entre ambas formaciones tras las elecciones municipales del pasado año. Ormazabal, anterior diputado general de Álava, considera que los dos partidos alcanzaron un acuerdo de gobierno hace un año y que no ha sido hasta las elecciones generales del 12 de marzo cuando se ha hecho patente. Este presunto pacto se materializó en el apoyo socialista a Ramón Rabanera en su designación como diputado general a cambio del "reparto de cargos", aunque la "vergüenza" que les producía aparecer juntos ha provocado una apariencia de oposición que ha derivado en la "no gobernabilidad" de la institución provincial. "Ambos han supeditado la ingobernabilidad de Álava en los resultados de las elecciones de Madrid", indicó Ormazabal, "lo que ha provocado un año de paralización de la Diputación foral alavesa en todos los sentidos". Por su parte, el portavoz del Partido Popular en las Juntas Generales de Álava, Santiago Abascal, desmintió las imputaciones hechas por Félix Ormazabal y aseguró que el "único" pacto de su formación es, en la actualidad, "con los alaveses, con sus intereses y con su progreso". En un comunicado, Abascal rebatió al dirigente nacionalista, y le recordó que, en todo caso, "quien debe aclarar la existencia de pactos ocultos es el PNV, por su acuerdo con HB, un partido que no condena las acciones terroristas".

Para hoy está prevista una reunión del diputado general, Ramón Rabanera, y el dirigente socialista Javier Rojo para hablar de alianzas, de la gobernabilidad en la Diputación y el Ayuntamiento y de los órganos de gobierno de Caja Vital.

En este sentido, el peneuvista Félix Ormazabal afirmó que este acuerdo va a llevar a los socialistas a "un precipicio político", porque elimina la posibilidad de que el PSE haga crítica política. En su opinión la gestión del PP en el ejecutivo foral es "excluyente" con el nacionalismo, aunque tendió la mano a las formaciones constitucionalistas para alcanzar "fórmulas de consenso" durante la presente legislatura, sin llegar a concretar nada más.