Plataformas de cinco pueblos del Vinalopó se unen para oponerse al tren de alta velocidad

Cualquier anuncio o reunión de Eduardo Zaplana, José Bono, José María Aznar o Rafael Arias Salgado que tenga que ver con el AVE que unirá Madrid con el corredor mediterráneo provoca temblores en las comarcas del Vinalopó. No importa el trazado que se postule de las diez alternativas que propone el estudio informativo del Ministerio de Fomento. Todos suponen impactos considerables: el que no arrambla con casas de huerta, atraviesa yacimientos arqueológicos y parajes de valor ecológico o condena a la extinción a parcelas de huerta de esta tierra de minifundios.

Las plataformas ciudadanas que se oponen al AVE en Villena, Elda, Monòver, Novelda y Aspe, han decidido unirse para manifestar su oposición a un proyecto que afectaría "negativamente" a las vidas de miles de ciudadanos "para que un puñado de ejecutivos pueda llegar media hora antes a su destino", sostienen.El 20 de abril finaliza el plazo de presentación de alegaciones al estudio informativo planteado por el Ministerio de Fomento. Sea cual sea el trazado elegido, el AVE ha de atravesar el Vinalopó para conectar Madrid con la costa mediterránea. La Plataforma por la no destrucción de los Valles del Vinalopó por el AVE, no cree que éste les vaya a beneficiar. Es más, se sienten "atropellados" por lo que consideran un medio de transporte elitista que va a utilizar sus tierras como una alfombra "que será pisoteada" por viajeros de las grandes ciudades.

Mientras tanto, en las estaciones ferroviarias de estas localidades cada vez paran menos convoyes. Los vecinos consideran que las inversiones proyectadas para el AVE podrían emplearse en mejorar las comunicaciones entre sus localidades, cada vez más aisladas entre sí. Todos comparten su sentimiento de rechazo hacia el AVE, y cada uno argumenta sus razones. Son las siguientes:

Villena

La plataforma Villena sin barreras se ha hecho eco del proyecto de AVE. Su objetivo de soterrar las vías férreas que estrangulan el crecimiento de la ciudad hacia el oeste, lo extienden al AVE. Los trazados centro (numerados del 5 al 8 en el estudio) pasan por yacimientos arqueológicos y afectan al 80% de los terrenos de regadío del término municipal. Los denominados oeste (9 y 10) también inciden del mismo modo, y además afectan a parte del Hondo de Carboneras y la Sierra de Salinas. Ambos cortan más de 25 caminos rurales y dividen numerosas fincas de cultivo. Los cuatro corredores del este (del 1 al 4) corren paralelos al trazado actual del ferrocarril y contemplan la posibilidad del soterramiento a la altura del casco urbano. No les importa si el AVE llega, mientras circule bajo tierra.

Elda

La agrupación local de Ecologistas en Acción dirige una protesta que enfrenta al AVE con alternativas de transporte que supongan una mayor comunicación entre los pueblos de la comarca. "Tren sí, AVE no" resume su postura, puesto que el trazado que más se acerca a su término municipal afecta a no más de cuatro kilómetros de tierras deshabitadas.

Monòver

Asociaciones vecinales y ecologistas se han unido en una plataforma. Los trazados oeste son los que más perjuicios les causan, porque arramblan con unas 300 casitas de campo que en muchos casos son primeras residencias, situadas en la partida de La Pedrera. Asimismo, las vías pasarían a 300 metros del casco urbano, estrangulando su crecimiento, y se haría necesaria la construcción de un túnel en las sierras La Umbría y Las Pedrizas, con una gran diversidad faunística que incluye especies en peligro de extinción.

Novelda

El AVE tiene aquí un especial impacto, pues en su término municipal se plantean las bifurcaciones hacia Murcia y Alicante. De las diez soluciones posibles, ocho afectan a Novelda. Las principales zonas perjudicadas son El Pla, muy rica en explotaciones agrícolas y donde se ubica buena parte de la industria nacional de mármol. Allí viven 500 personas en cerca de 200 casas de huerta. El descuelgue de la vía convencional estrangula a muchos terrenos, que ya están experimentando una pérdida de su valor ante la amenaza de la expropiación. El estudio marca también como zona urbanizable la futura ubicación de la estación del AVE en Novelda, pese a que sobre esos terrenos se levanta un barrio en el que residen cerca de 400 personas. El AVE pasaría también por El Campet, zona de crecimiento de Novelda, Aspe y Monforte.

Aspe

La Plataforma Aspense contra el AVE clasifica el impacto en tres niveles: social y económico, ambiental y cultural. Señalan la pérdida de suelo agrícola e industrial, lo que conllevaría la pérdida de puestos de trabajo, la fragmentación de los hábitats de poblaciones animales y vegetales, y la afección al patrimonio de Aspe, como la Casica de la Virgen de las Nieves, además de la destrucción de parajes de valor ambiental, como la Fuente de la Gota y el Barranco de las Monjas.