Sarobe estrena en Urnieta su segunda ópera de cámara

El centro de artes escénicas Sarobe, de Urnieta, pondrá por primera vez ante el reto del público el próximo viernes la ópera Zapatos de mujer, un montaje de producción propia en clave de comedia que relata la comunicación imposible entre un hombre y una mujer.El espectáculo, que se enmarca en el proyecto Euskal Kamara Opera, supone la segunda entrega de una línea de trabajo que se inició en 1997 con Iziar, con la que se persigue producir una ópera de cámara cada dos años.

El proyecto de Zapatos de mujer ha involucrado a un importante plantel de artistas del País Vasco que ayer presentó satisfecho las dos funciones (20.00) con las que se estrenará el viernes y se volverá a representar el domingo en las instalaciones de Sarobe.

El responsable del centro, Enrique Santiago, autor del libreto y director de escena de esta ópera, narra los desencuentros de un hombre y una mujer que "están solos en un espacio redondo y no llegan a comunicarse. Hay un coro de semidioses que se encargan de subrayar los defectos de cada uno y de su relación durante el transcurso de la obra".

El teatro, la música, el cine y otras disciplinas confluyen en el escenario al servicio de la historia que plantea, según Santiago, "un conflicto novedoso", de un tema eterno. Zapatos de mujer, con música de Ángel Ilarramendi, convierte en cantante al actor Ramón Aguirre y cede el protagonismo a Isabel Álvarez, a David Azurza e Izaskun Arruabarra, entre otros artistas.

Todos participarán en el estreno oficial de la obra dentro del festival Musikaste de Rentería, que supondrá el inicio de sendas giras previstas por España y Latinoamérica. Por el momento, se centrarán en la versión castellana de Zapatos de mujer "por una razón económica, según Santiago. "Esta versión [con un presupuesto de 20 millones de pesetas] requiere de una financiación de lanzamiento y luego tiene que depender de su propia calidad. Pero cuando nos enfrentamos a una lengua minoritaria como el euskera es más difícil y hace falta mayor apoyo institucional". En todo caso, la versión en euskera está casi terminada.