La hora de la calidad

El conjunto de acuerdos firmados en esta legislatura habrá que desarrollarlos en los próximos cuatro años

Los próximos cuatro años, gobierne quien gobierne, ya tienen unas directrices marcadas en lo que a Educación se refiere. No puede ser de otra forma puesto que en los estertores de esta legislatura se han firmado acuerdos que sientan las bases de lo que será el futuro próximo. Se han firmado pactos con los sindicatos tanto para la escuela pública como para la concertada. Se conoce la estabilidad de los interinos de la educación, por dónde caminarán las políticas de solidaridad, cómo se organizarán las actividades extraescolares, las plantillas docentes, el impulso de la participación de los padres en el devenir educativo, y el ritmo de construcción y equipamiento de los centros que completarán el mapa andaluz.Y una vez encauzada la implantación definitiva de la LOGSE, casi todos coinciden en que la calidad es ahora la palabra. Calidad para un sistema público, una vez que la reforma educativa, en principio, se desarrollará sin muchos sobresaltos. Y como siempre, dinero. Desde IU se propone una ley de financiación estatal que recoja con justicia lo que le corresponde a Andalucía. "Esta ley debe completarse con otra autonómica", dice José Román, responsable de Educación en IU. En la necesidad de esa ley coinciden el resto de los partidos.

Desde la federación apuestan, además, por una mayor participación de los padres, que deben beneficiarse de gratuidad en los libros de texto, en el transporte, comedor y otros servicios escolares. Exigen, además, que se complete la escolarización infantil (tres años), "lo que supondrá una ventaja para la incorporación de la mujer al mundo laboral", explica Román.

Efectivamente, la escolarización, no obligatoria en este tramo de edad, ha sido una de las asignaturas pendientes en esta legislatura y una reivindicación de toda la oposición.

También desde el PSOE se habla de la legislatura de la calidad. El propio consejero de Educación, Manuel Pezzi, piensa que el programa electoral de su partido recoge los compromisos ya acordados con los distintos sectores de la comunidad educativa, la mayor parte de ellos plasmados en el Acuerdo por la Educación.

Pezzi cree que los dos grandes retos para los próximos años son la Formación Profesional y la calidad. Sobre lo primero coincide con IU en que hay que unificar los tres subsistemas de la FP, la reglada, la ocupacional, y la continua, que en estos momentos está en manos de dos consejerías, la de Trabajo y la de Educación. "Ya hemos creado el marco, que se acordó con Trabajo, con los sindicatos y con la Confederación de Empresarios, y ahora hay que completar la oferta y rentabilizar los recursos que llegan de Europa". Hay 740.000 millones acordados para este capítulo hasta el 2006.

Respecto a la calidad, Pezzi cree que es el momento de incorporar al sistema las exigencias de las familias, como son los idiomas desde la infancia, los colegios bilingües, las nuevas tecnologías, la multiplicación de las actividades extraescolares. La propuesta nacional de abrir los colegios 11 meses del año representa una pequeña rebaja respecto a lo anunciado por Pezzi el pasado verano: puertas abiertas los 365 días.

Por otro lado, y siempre en la línea apuntada de la calidad, desde la Consejería se apuesta por un apoyo a los alumnos con dificultades en el aprendizaje, "a esos que están desmotivados, sobre todo en la Educación Secundaria Obligatoria, para que no se descuelguen del sistema".

Equipo humano

La oposición coincide en que es necesario garantizar el equipo humano suficiente para atender a un millón y medio de estudiantes (excluidos los universitarios) que se reparten entre 3.963 colegios públicos y privados. La titularidad de estos centros se ha pronunciado en esta legislatura hacia lo público, que ha pasado del 75% al 80%.

La necesidad de más especialistas y profesores de apoyo es otra reivindicación de todos los partidos de la oposición, que, además, hacen hincapié en una mayor asistencia al programa de adultos, así como al equipamiento y construcción de los centros que se necesitan para ajustarse a los requisitos de la LOGSE.

Desde IU y el Partido Andalucista se sigue reclamando algo que el consejero de Educación ha repetido durante toda la legislatura. Que el Gobierno central recoja el censo que corresponde a Andalucía y que sume a la cantidad de dinero que llegaría por ese concepto la deuda de 42.000 millones por el déficit en las transferencias educativas.

IU propone, además, que la permanente formación del profesorado se realice en horario lectivo, en los propios centros, y que se sufrague con las arcas administrativas, y, coincide con el resto de los partidos (también con el PSOE, ya se han firmado acuerdos al respecto durante esta legislatura) en que la participación de los padres ha de potenciarse con el mismo ahínco con que se debe reducir la progresiva desmotivación de los docentes.