Los políticos se encomiendan a la patronal Todas las formaciones presentan iniciativas para desarrollar el sector privado. Propuestas de los partidos para reducir el paro
El reconocimiento del protagonismo del empresario en la creación de riqueza se ha convertido en la coincidencia más notable en los discursos de los candidatos a la Junta de Andalucía. El socialista Manuel Chaves no deja pasar oportunidad para señalar el fortalecimiento de la "cultura emprendedora" como uno de los pilares de su ideario. La candidata popular, Teófila Martínez, le acusa de usar una idea que su partido ha defendido siempre. PA e IU también presentan iniciativas para desarrollar el sector privado.La debilidad de la iniciativa empresarial en la región es ahora señalada como uno de los principales déficit de la economía andaluza. El ex presidente del Gobierno Felipe González, en sus más recientes intervenciones en la región, no duda en señalar que la falta de apoyo socioeconómico a experiencias empresariales arriesgadas impide traducir el crecimiento económico en ganancia de competitividad. "La mayor solidaridad que podemos dar hoy a los ciudadanos es redistribuir la capacidad de emprender", dijo hace una semana en una videoconferencia desde el Parque Tecnológico de Málaga. Sin embargo, Javier Navascués, de Izquierda Unida, advierte contra estas ideas: "Cuando se habla de emprendedores, defendiendo un concepto de supervivencia norteamericano, se puede inducir la conclusión de que si estás parado es por tu culpa".
El número de empresas registradas en Andalucía ha crecido notablemente en los dos últimos años (16.498 nuevas sociedades en 1999), pero su proporción es aún inferior al promedio nacional. Las 360.000 firmas que tienen su sede social en la comunidad, suponen un 14% de las empresas nacionales, en una región que acumula el 18% de la población y un 17% del territorio. "Nuestro objetivo es que haya condiciones suficientes para que se llegue a las 500.000 empresas en la próxima legislatura", indica Antonio Claret, coordinador de Economía del PSOE.
Un reciente informe del Círculo de Empresarios muestra que Andalucía es la segunda comunidad con mayor peso del sector público empresarial a pesar de que el Instituto de Fomento ha vendido varias sociedades en los últimos años. Una circunstancia que se explica por la tendencia adoptada en esta legislatura por la Junta, con socialistas y andalucistas como socios de gobierno, de crear empresas públicas para gestionar las inversiones. Esta decisión estratégica ha sido criticada por IU, que defiende que también se puede crear empleo directamente desde la administración pública.
Salvador Fuentes, del PP, cree primordial redistribuir los presupuestos autonómicos. "Ahora apenas se invierte un 10%, el gasto corriente se está comiendo a las inversiones", asegura. Fuentes sostiene que, para crear un caldo de cultivo empresarial, el papel de la Administración autonómica debería ser liberar recursos para aumentar las infraestructuras y formar a los trabajadores.
La petición más habitual de la patronal a la Junta es que aligere los trámites burocráticos requeridos para realizar una actividad empresarial. Sus quejas se centran sobre todo en la regulación medioambiental que ha desarrollado en esta última legislatura. El andalucista Javier Aroca señala que "hay que fortalecer la industria y, sobre todo, impulsar desde la Administración su diversificación", para facilitar las nuevas vocaciones empresariales. Según los datos que expuso ayer el consejero de Trabajo, Guillermo Gutiérrez, el sector industrial supera ya, con una producción de 2 billones de pesetas, a turismo (1,8 billones) y agricultura (1,2 billones), informa Ana Torregrosa. Pero el peso de las empresas industriales andaluzas es todavía muy bajo en el total nacional: apenas un 12% de las firmas son andaluzas.
Los partidos también coinciden en que para ganar competitividad hay que vender en otros mercados. Aquí la economía andaluza exhibe un saldo comercial positivo, que depende casi en exclusiva de los productos agroalimentarios. Pero hay una fuerte concentración: cerca del 80% de las exportaciones se destinan a la Unión Europea. "Y el 55% de las exportaciones las soportan 10 empresas", advierte Fuentes.
Sobre comercio interior IU, propugna una moratoria sobre grandes superficies, fortalecer los equipamientos colectivos de las zonas tradicionales y una nueva regulación que dé seguridad al comercio ambulante y le exija más calidad. El PSOE también propone la agrupación de comercios tradicionales en centros abiertos, con aparcamientos, guarderías y tarjetas de descuento colectivas. Los socialistas incluyen en su programa un plan estratégico de defensa del consumidor.
La creación de empleo es objetivo prioritario de todos los partidos políticos que concurren en la próxima convocatoria electoral. En la última legislatura, el fuerte ritmo de crecimiento de la economía andaluza (16,9%), ha generado 330.000 puestos de trabajo en la región, la quinta parte del total nacional. Sin embargo, el descenso de la tasa de paro ha sido mucho más suave: según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el 26,8% de la población activa andaluza sigue desempleada; la tasa de paro nacional está en el 15,4% y el promedio en la zona euro es del 10%.
Las perspectivas económicas son buenas, pero los obstáculos para seguir reduciendo el paro son muchos. Andalucía mantiene un ritmo de crecimiento demográfico más elevado que la media nacional y, sobre todo, una tasa de ocupación entre las mujeres muy baja. Según el INE, tan sólo un 37,5% de las andaluzas buscan activamente empleo, y el 37,6% de ellas están paradas. En cuanto las condiciones económicas y sociales lo permitan, es previsible que el mercado laboral femenino se normalice y que muchas más mujeres se incorporen a la búsqueda de empleo.
Estas son algunas de las políticas que platean los partidos.
PSOE. El candidato socialista, Manuel Chaves, ya ha marcado un objetivo para la economía andaluza en los próximos cuatro años: 300.000 empleos. Para ello, el PSOE confía en el desarrollo de los servicios sociales originen nuevos yacimientos de empleo y, sobre todo, en centrar recursos en educación, investigación y nuevas tecnologías para elevar el nivel de formación. Los socialistas insistirán en incentivar la reducción de la jornada laboral.
PP. Las medidas anunciadas por Teófila Martínez hace una semana se centra en crear condiciones para favorecer el surgimiento de nuevas empresas. Los populares quieren prestar "especial atención" a las pymes y asignar 25.000 millones al plan de comercio interior para ganar control de los canales de distribución. El PP también prevé inversiones en actuaciones de desarrollo local para diversificar la producción .
IU. La federación quiere hacer de la reducción de la jornada laboral uno de los principales instrumentos de creación de empleo. También cree necesario centrar el esfuerzo inversor en el tejido industrial por generar contratos más estables y reivindica la capacidad de generar empleo de la inversión pública.
PA. Los andalucistas creen prioritario que la Administración se dedique a proveer infraestructuras, insistir en la formación del capital humano y diversificar la industria hacia nuevas áreas como el ocio o las energías limpias. También prevé bonificaciones para que los empresarios autónomos consoliden sus contrataciones y quieren centrar todas las actuaciones de empleo en una sola Consejería.
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