Caruana aconseja a las cajas rurales un modelo de banca federada

Las cajas rurales deben orientar sus pasos hacia un modelo de banca federada si pretenden competir en el mercado financiero europeo. El director de Supervisión del Banco de España, Jaime Caruana, abogó ayer durante las 9ª Jornadas de Cajas Rurales valencianas, por que estas cooperativas multipliquen las alianzas y funcionen como un sólo grupo. Caruana, hasta hace un año director general del Tesoro, precisó que la "centralización" de decisiones no debe interpretarse como una renuncia a la soberanía de cada caja sino como una estragegia de futuro. "Eso es importante para que el conjunto de cajas funcione como si fueran una sola entidad, pero requiere un impulso adicional, porque el modelo asociativo no es suficiente", agregó.

El encargado de la supervisión en el Banco de España advirtió que las nuevas tecnologías provocarán un "cambio dramático" en el sistema bancario, el más inmediato, una reducción drástica del coste de las transacciones. "Nadie debe pensar que no le van a afectar estos fenómenos", advirtió a los dirigentes de las cajas rurales, a quienes les señaló que "el que no corre, retrocede".

Caruana hizo hincapié, por último, en que las cajas se anticipen a las decisiones del regulador de las reglas del juego bancarias. En este sentido, adelantó que la supervisión, en el futuro, pondrá el acento en aspectos cada vez más cualitativos. Por ejemplo, las entidades financieras deberán funcionar con ratings internos , que valorarán desde el riesgo de las carteras de créditos hasta la calidad de los sistemas de diagnóstico de la gestión de la entidad. "El supervisor incrementará sus exigencias de recursos propios a cada entidad en función de estos análisis", declaró Caruana.

Un activo de un billón

El consejero de Economía y Hacienda de la Generalitat, Vicente Rambla, abrió la jornada, que continúa hoy con la intervención del consejero del Banco Central Europeo Eugenio Domingo Solans, hablando también de integración y alianzas estratégicas. "El Consell es consciente de la aportación de las cajas rurales a la economía valenciana [con un activo algo superior al billón de pesetas y cerca de 10.000 millones de beneficio neto en 1999], de ahí que les demos un tratamiento igual al que reciben otras entidades de crédito", explicó Rambla.

Rambla calificó de "satisfactorio" el clima de colaboración entre la Administración y las cajas rurales, como demuestran los convenios de colaboración financiera ahora en vigor, suscritos para el fomento y apoyo del empleo, la formación profesional ocupacional, las estructuras comerciales, la exportación, el sector agroalimentario y la financiación empresarial, entre otros.

El número de entidades operativas a finales de 1999 en la Comunidad Valenciana representa más del 42% de las cooperativas de crédito españolas. Su volumen de depósitos representaba al cierre del año pasado algo más del 19% del total de su sector.