"Los interpretes que no llegan a las masas no son despreciables"
Luz Casal ha tardado cinco años en publicar un nuevo disco, por eso sus seguidores están especialmente contentos con la llegada al mercado de Un mar de confianza (Emi), un octavo elepé en el que la vocalista gallega continúa explotando su capacidad para cantar letras cargadas de sentimientos sobre instrumentaciones ricas en ambientes y alejadas de su pasado rockero. Y sus fans vascos estarán especialmente ilusionados, ya que Luz, dentro de una gira española que precede a otras previstas por Francia (donde ha vendido 300.000 ejemplares de un recopilatorio) y Suramérica, repasará su repertorio el próximo viernes en Bilbao (La Casilla; 22.00) y el sábado en San Sebastián (Kursaal; 21.00).Pregunta. ¿Qué ha hecho en los últimos cinco años?
Respuesta. Trabajar, tomarme las cosas con tranquilidad, porque tampoco quiero ser indispensable en todas las tertulias, estudiar un poquillo,...
P. ¿Estudiar qué?
R. Pues música, tío, ¿o te crees que ya he llegado al tope de lo que puedo hacer? No me ha ido mal, pero aspiro a mejorar, a que mis canciones perduren más que la temporada que se le presupone a un disco.
P. La canción Mi confianza describe una fe ciega en otra persona. ¿A quién, o a qué, recurre Luz cuando atraviesa un bache personal o creativo?
R. Soy hija única y, generalmente, me apaño sola. Hombre, una vez que has tocado fondo siempre es bueno saber que tienes alguien a quien echar mano, pero no soy de volcar mucho mis problemas en los demás.
P. ¿No le apena no haber triunfado como rockera?
R. Pero, ¿cuántos rockeros han triunfado en este país? Eso por un lado, porque para mí en este disco todo está entroncado con el rock. Parece que toda la peña sólo se circunscribe a lo evidente: ñaca, ñaca, ñaca. Hay ejemplos para aburrir, lo que cuenta es la actitud. Metallica graba con una orquesta. ¿Son menos rockeros por eso? ¿Son peores o mejores que antes?
P. ¿Las ventas son lo único que hace grande a un artista?
R. No. Hay intérpretes que no llegan a las masas, no sé si por no tener una sensibilidad determinada, y no por eso, por no vender discos, son despreciables. Ni porque los vendan son cojonudos.
P. ¿Qué opina de la iniciativa de cantantes que han trasladado a los políticos exigencias de las mujeres maltratadas?
R. Cada cual que haga lo que quiera... Siempre tiene que haber alguien que dé la cara por algo, pero yo lo hago a través de las canciones. No es que no me quiera mojar, pero nunca sería parte de un jurado, porque me cuesta, todo es muy relativo. Por eso soy pasota, porque lo veo así. No me gusta coger la bandera y ser Juana de Arco, no va con mi carácter. Soy una persona muy tímida y, fuera de la música, me cuesta estar en otras situaciones.
P. ¿Su terapia contra la timidez es subirse a un escenario ante miles de personas?
R. No sé, no me analizo tanto, pero eso es parte de la timidez, sólo que llevado al otro extremo, que es ser casi impúdico mostrándote como eres. Tengo la suerte de trabajar en la música y por ahí se me van los pros y contras de mi carácter.
P. ¿Aún se pone nerviosa antes de una actuación?
R. Ya lo creo. Y se me cierra el estómago, y me pasan muchas otras cosas más vulgares. Pero no tengo ninguna manía, por lo menos asumida. Hombre, si apareciera alguien que me cae fatal, intentaría fulminarlo para que no me diera mal rollo. Salvo eso...
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.