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Elecciones 2000

Malestar en la dirección de IU por las críticas de Anguita al pacto electoral con el PSOE

Carlos E. Cué

La primera intervención del coordinador general de IU, Julio Anguita, en un mitin tras el pacto con el PSOE ha causado gran malestar entre los dirigentes de la coalición. El pasado viernes, en Sevilla, Anguita mostró claras reticencias al pacto y dijo que había que estar "vigilantes". Tanto el candidato, Francisco Frutos, como el portavoz, Víctor Ríos, han hablado con él tras ese mitin para hacerle notar que, aunque ésa no fuera su intención, su discurso está siendo aprovechado por "los medios de comunicación de la derecha" para crear la sensación de que Anguita y Frutos dan mensajes contradictorios.

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Todos los dirigentes que pudieron comprobar el efecto que las palabras de Anguita en Sevilla tuvieron en algunos medios, y especialmente en Televisión Española, aseguran que las manifestaciones del todavía líder de la coalición "se sacaron de contexto". A pesar de ello, también tienen muy claro que Anguita lleva mucho tiempo tratando con los medios de comunicación, por lo que debería ser consciente de que cualquier palabra suya que muestre desconfianza hacia los socialistas o ponga en entredicho la bondad del pacto va a ser utilizada de inmediato contra el acuerdo.En todo caso, estos mismos dirigentes, que no quieren dar sus nombres porque, según aseguran, se trata de un asunto "muy delicado" debido a la "sensibilidad a flor de piel" de Anguita, confían en que haya recapacitado durante este fin de semana y, a partir de ahora, trate de unificar su discurso con el tono moderado que mantiene Frutos.

Una de las frases que más han preocupado es aquélla en la que Anguita argumentaba que el PSOE ha pactado con IU sólo "por una necesidad de escaños, porque no cree en la unidad de acción de la izquierda". Los dirigentes de IU habían establecido una especie de pacto tácito con los socialistas para no hablar de los motivos partidistas que habían llevado a cada una de las formaciones a acercarse a la otra. Si no, argumentan estos dirigentes, el PSOE podría estar constantemente señalando que IU ha firmado sólo por las malas expectativas electorales que tenía o por su dramática situación financiera.

Es imposible, según estos dirigentes, que Frutos y Anguita mantengan un mismo tono durante la campaña, ya que sus personalidades son muy distintas y el coordinador general siempre sonará "más encendido". Pero la necesidad de unificar al menos el contenido del discurso sin que se escape ninguna frase susceptible de ser malinterpretada es mayor según avanza la campaña, entre otras cosas porque la participación de Anguita se presume fundamental. No está aún cerrado, pero es casi seguro que participará en unos siete grandes actos, la mayoría en Andalucía, además de las diversas entrevistas que concederá.

Tanto Ríos como Frutos han hablado con él durante el fin de semana para tratar de convencerle de que debe cuidar mucho su discurso, de modo que no se aprecien discrepancias con el tono moderado y de nula crítica a los socialistas que ha mantenido el candidato electoral desde que se produjo el pacto. Varios dirigentes aseguran que Anguita se ha mostrado sensible a esta necesidad, por lo que esperan que la imagen del pasado viernes en Sevilla no se repita durante la campaña.

El sector antisocialista

Las personas encargadas de diseñar la estrategia de IU tampoco quieren olvidarse de un sector muy importante de su electorado que es profundamente antisocialista y que se muestra contrario a cualquier pacto con el partido liderado por Joaquín Almunia. Por eso han diseñado un discurso en el que, tras resaltar que el pacto se ha hecho para ganar las elecciones y hacer un Gobierno "de izquierdas", se destaca que IU no pierde su identidad por haber firmado con el PSOE y que sigue defendiendo su programa electoral y sus ideas más radicales.

El discurso de Anguita podría representar de alguna manera a este sector - "podría ser nuestro Alfonso Guerra", ironiza un dirigente-, pero se vuelve contraproducente porque lo que viene a destacar es la sensación de discrepancia interna, sobre todo con Frutos, en lugar de fomentar la unificación de mensajes, algo fundamental en un momento de incertidumbre total como una etapa electoral, según los dirigentes más preocupados por el papel del que sigue siendo el líder de la coalición.

Es imposible que Anguita reduzca su participación en los mítines del 12-M, sobre todo porque se encuentra muy recuperado tras su operación de corazón, el pasado 16 de diciembre, por lo que los coordinadores de la campaña se limitarán a sugerirle que siga, aunque con otro tono, el mismo discurso que Frutos.

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