"Nunca he tenido angustia por no escribir"
,Debe ser de las pocas personas que escribe y a la que no se le conocen enemigos. José Antonio Garriga Vela (Barcelona, 1954) se dedica desde Málaga a vivir y recrearse de los visto, vivido o leído o contado. El Ateneo de la ciudad acaba de editar Cuentos del sábado, una selección de los relatos mínimos que semanalmente publica en el diario Sur desde hace seis años. Su segunda y esperada novela, bajo el título aún provisional de El vendedor de rosas, espera la primavera para salir en Destino.Pregunta. ¿Lo que le comentan sus amigos acababa en sus cuentos?
Respuesta. Robo personajes e ideas. Hago un cóctel de personajes reales y formo uno ficticio. Si uno es muy redondo, lo rapto.
P. ¿El cuento nace o se hace?
R. La mayoría nace, pero en otras ocasiones tengo que forzarlo. Angustia porque no escribo nunca he tenido. Si no me sale nada, ya tengo un tema.
P. Sus personajes son un poco sonámbulos. Nunca se sabe si han muerto, son un sueño, una sombra, o pura literatura.
R. Es que los personajes literarios no mueren. Se mueven por un mundo ficticio. Nadie sabe a dónde van los personajes de las novelas cuando se acaban. Van a la cabeza de otra persona que lee. Quizá sea una autodefensa contra la historia de la muerte. En la nueva novela lo del sonambulismo está muy presente.
P. Adelante algo de su novela.
R. Trata de la gente que en estos momentos de vértigo se queda quieta y pensando. Se desarrolla entre Málaga y Barcelona y cubre desde la Transición hasta ahora. No tendrá una atmósfera tan obsesiva como Muntaner, 38. Málaga será una ciudad mágica.
P. A su primera novela la pusieron por las nuves.
R. Gustó mucho en Barcelona a los castellano-escribientes, los lejanos al localismo, que no pertenecen al stablishment y no creen que Barcelona fue la ciudad deslumbrante que venden sino la oscura.
P. ¿Por qué a los socialcatalanes les gusta tanto el fútbol, la pasta y la buena vida?
R. Ha definido la socialdemocracia pura. Le falta el buen follar. Y, perdone, no nos gusta el fútbol, sino el Barça.
P. Ahora hace artículos de opinión. De ésos con foto. No tiene usted cara de articulista de opinión.
R. Es que los fotógrafos se empeñan en que te retrates con la mano en la cara. Mi compadre Juan Barber dice -y estoy de acuerdo- que los que se retratan con la mano en la cara no son de fiar.
P. La gente cree que ustedes, los escritores malagueños son como una piña/lobby. ¿Se quieren tanto o es puro marketing?
R. Ni una cosa ni otra. A unos los quieres más y a otros menos. Quizá sea puro marketing, pero más vale lobby que nada.
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