AVE, UV, ETT

FRANCESC DE P. BURGUERA No cabe duda de que la bondad y generosidad del presidente Zaplana no tienen límites. Viendo la difícil situación en que se encuentra Unió Valenciana no ha dudado en acudir en su ayuda ofreciéndole a su presidente, José María Chiquillo, un puesto en las listas del PP en las próximas elecciones generales. Y no sólo eso. Su generosa oferta va mucho más allá puesto que el presidente Zaplana ofrece a UV empleos y asesorías para sus miembros e, incluso, "facilidades burocráticas para empresas afines a UV". (?). Es decir, que el presidente no sólo ofrece cargos políticos sino puestos de trabajo. Convierte al PP en una especie de ETT (Empresa de Trabajo Temporal), en una especie de oficina de colocación. Y todo ello, movido por su "aprecio y cariño" hacia UV. Y hay que convenir que esto no son sólo palabras sino que ya lo ha demostrado con hechos, como se vió en las pasadas elecciones autonómicas en las que una buena nómina de destacados y destacadas militantes de UV encontraron acomodo en listas y cargos de diversa índole. Y todo ello, pensando en el futuro del partido valencianista. "Si en unos momentos de dificultad como los que tiene UV nosotros podemos contribuir a que su futuro sea más esperanzador, que sepan que cuentan con nuestro apoyo". No cabe duda de que estas palabras pronunciadas por el señor Zaplana hablan con toda elocuencia de la bondad de su corazón y de su infinita misericordia hacia los desvalidos. Y de su genialidad a la hora de afrontar determinados problemas políticos.

Claro que esta genialidad no puede alcanzarse a todas horas y ante cualquier problema. Tenemos, por ejemplo, el caso del AVE. Después de todo el triunfalismo con que se pesentó el AVE Madrid-Valencia durante los pasados meses, a finales del verano, parece ser que ha llegado el tío Paco con las rebajas. De tener el AVE como una cosa decidida y con un trazado que prácticamente iban a consensuar los presidentes autonómicos de Madrid, Castilla-La Mancha y Valencia, nos encontramos con que la cosa está cada vez más en mantillas. El Ministerio de Fomento no parece que esté por la labor de construir un AVE lo más directo posible entre Madrid y Valencia. Desde el principio, el trazado preferido por el Ministerio ha sido el trazado Sur, el que utiliza la línea férrea del siglo pasado: Madrid-Alcázar de San Juan-Valencia. Tan es así que el propio presidente Zaplana, que empezó presentándose com el gran conseguidor del AVE Madrid-Valencia con una duración de 100 minutos, no hace mucho declaraba que sería necesario pedir el apoyo de los ciudadanos valencianos para presionar ante el Ministerio de Fomento con el fin de conseguir el trazado más conveniente para el País Valenciano. Parece ser que el Ministerio sigue obsesionado con hacer que el AVE pase por Alcázar de San Juan (importante "nudo ferroviario" como decíamos antes).

En todo caso, lo que ahora importa son las próximas elecciones generales. Y el presidente Zaplana quiere asegurarse de que su partido, el PP, consiga los mejores resultados para ofrecérselos al señor Aznar, que falta le van a hacer. Y para ello, nada mejor que eliminar un competidor como UV ofreciéndole el oro y el moro. Tampoco es nada del otro mundo. Después de todo, los electores de UV, en buena medida, son parejos con los del PP.