La reforma del mercado de San Miguel no acaba con sus barreras

La profunda rehabilitación del mercado de San Miguel, en Centro, no ha eliminado las barreras arquitectónicas que impiden el acceso al recinto de los minusválidos en silla de ruedas. Todas las puertas de entrada a este edificio, levantado en 1915 y reinaugurado oficialmente a mediados de diciembre, mantienen al menos dos escalones, aunque algunas tienen hasta seis o siete.En la reforma del mercado se han invertido 225 millones de pesetas. La Comunidad de Madrid y la Unión Europea han aportado 180 millones y el resto lo han puesto los comerciantes.

La directora general de Comercio y Consumo de la Comunidad, Concepción Guerra, explica que el mantenimiento de las barreras arquitectónicas del mercado no ha sido producto "ni del olvido ni de la falta de previsión". "Nosotros propusimos una serie de modificaciones para hacer más accesible el mercado, pues en la zona viven numerosos ancianos, pero al tratarse de un edificio emblemático con el máximo nivel de protección urbanística, la normativa nos impide tocar un solo escalón", explica.

Guerra asegura que para resolver el problema se instalará una rampa desmontable. "Es uno de los últimos retoques que nos quedan por hacer", añade.