Cinco aviones fueron desviados a otras capitales por la falta de visibilidad en Barajas

VIENE DE LA PÁGINA 1 En los paneles informativos de la carretera de acceso al aeropuerto de Barajas se podían leer por la mañana mensajes disuasorios sobre la necesidad de consultar con las compañías por los problemas de niebla.

La baja visibilidad en Barajas obligó a que cinco aviones fueran desviados a otros aeropuertos. Un vuelo de la TWA procedente de Nueva York no pudo aterrizar en Madrid "por problemas técnicos" y tuvo que hacerlo en El Prat de Barcelona, según AENA. Idéntica situación llevó a un avión procedente de Larnaca, de las líneas aéreas sirias, a Barcelona. Otros tres aviones de Iberia no pudieron tomar tierra en Barajas; entre ellos se encontraba un vuelo de Lisboa que aterrizó en Valencia. Otro avión procedente de Jerez tuvo que regresar a la ciudad gaditana ante la imposibilidad de aterrizar en Madrid.

El centro de control de Barajas aumentó a las once de la mañana el número de movimientos autorizados, hasta 60 a la hora. A las doce del mediodía la visibilidad era de unos mil metros en las pistas de despegue y aterrizaje, según explicó AENA. A las dos de la tarde, la torre de control eliminó las restricciones de vuelo, por lo que el aeropuerto volvió a operar a su máxima capacidad (75 salidas y aterrizajes por hora).

De los 30 vuelos cancelados hasta las ocho de la tarde, siete pertenecían a Iberia, con destinos a Valencia, Barcelona, Santiago de Compostela, Lisboa, Jerez de la Frontera y Palma de Mallorca. Air Nostrum suprimió salidas a Pamplona, Niza, Zaragoza, Bilbao, San Sebastián y Santander. En el caso de Air Europa, los afectados se dirigían a Bilbao, Barcelona, A Coruña, Oporto, Asturias y Jerez de la Frontera. También las compañías Air France y Spanair cancelaron salidas a Oporto (Portugal), Toulouse (Francia) y Tenerife.

Acoplados en otros aviones

Una portavoz de Iberia señaló anoche que los pasajes de los vuelos cancelados fueron "acoplados en otras salidas" con el mismo destino. De este modo se redujeron los inconvenientes para los viajeros. "Además, en estas fechas, como hay pocos pasajeros porque la actividad empresarial disminuye, los afectados han sido menos de los que podrían haberse dado en un día normal", señaló la citada portavoz.

A las seis de la tarde habían operado 599 de los 953 vuelos previstos para ayer. Las 337 salidas sufrieron, según los datos facilitados por AENA, un retraso medio de 18 minutos que afectó a la mitad de las aeronaves. Las 262 llegadas tuvieron un retraso menor, que se sitúo en los 16 minutos. Barajas tiene previstos para hoy 906 vuelos.

El aeropuerto informó anoche de que las previsiones del Instituto Nacional de Meteorología anunciaban para hoy que habría buena visibilidad en la zona del aeropuerto. Barajas mantuvo que se consultaría con las compañías por si hubiera cambios en los horarios de salida o de llegada de los aviones. Desde las siete de la mañana, se reunió el gabinete de crisis de Barajas, formado por los directivos de AENA y de las compañías aéreas.