Polo, condenado a 48 años de cárcel

El etarra Sergio Polo fue condenado ayer a 48 años de prisión por haber intervenido como integrante del comando Basati de ETA en el atentado que causó la muerte al guardia civil Emilio Castillo de la Franca y gravísimas lesiones a su compañero, el agente Victoriano Álvarez.El atentado se produjo el 18 de marzo de 1993, cuando los guardias circulaban en el vehículo de uno de ellos por la avenida de Ategorrieta de San Sebastián. Los terroristas Sergio Polo, Agustín Almaraz y José Ignacio Alonso Rubio -los dos últimos ya condenados por estos hechos- esperaron a que el coche de las víctimas se detuviera en un cruce y Almaraz disparó seis veces contra los dos guardias. Polo, mientras, cubría la acción con otra pistola que le había entregado Almaraz, mientras Alonso esperaba en un vehículo para facilitar la fuga.

Emilio Castillo falleció instantáneamente al atravesarle el cráneo un proyectil, mientras Victoriano Álvarez tardó casi tres años en curar de sus heridas, de las que le han quedado importantes secuelas que le incapacitan total y permanentemente para su vida profesional.

La Sección Primera de la Audiencia Nacional ha considerado que los hechos constituyen un delito de atentado con resultado de muerte y otro de asesinato frustrado. El tribunal ha considerado válidas a la hora de condenar a Polo las declaraciones incriminatorias de sus compañeros Almaraz y Alonso, a pesar de que la sección cuarta de la misma Audiencia absolvió el pasado mes de noviembre a Polo de un delito de terrorismo del que estaba acusado por entender que las declaraciones de los coimputados no son suficientes, sin otras pruebas, para enervar la presunción de inocencia.

Por otro lado, la juez Teresa Palacios tomará hoy declaración a Sergio Medina, el joven relacionado con la violencia callejera en Navarra, que resultó herido al hacer explosión un artefacto en el coche en el que viajaba junto con Joseba Mirena Sáenz de la Higuera, El Abuelo, considerado el coordinador de los grupos Y de esa comunidad autónoma. La juez ya dictó auto de prisión contra el joven, que lo ha recurrido alegando que el no fue autor de los hechos, sino una víctima.