HB no consigue que los otros partidos de Lizarra apoyen la huelga general

El PNV, Eusko Alkartasuna e Izquierda Unida, los restantes partidos de Lizarra, no respaldarán el paro general en apoyo de los presos etarras convocado por EH-HB para el próximo día 27 porque lo consideran "un gesto para su galería condenado al fracaso". Esas formaciones, que estudian otras medidas de presión, ya advirtieron de su negativa a la coalición independentista durante la huelga de hambre que, con idéntico fin, mantuvieron en noviembre pasado parlamentarios de EH-HB. A pesar de ello y de las dudas del sindicato ELA, Herri Batasuna decidió convocar la huelga.

La dirección de Herri Batasuna no consultó a sus compañeros de viaje de Lizarra la conveniencia o no de convocar una huelga general en apoyo de los presos etarras. Se limitó a sondearles para ver si la respaldarían y, en última instancia, les comunicó que su decisión estaba tomada tres días antes de hacer pública su llamada al paro.El portavoz de la Mesa Nacional de HB, Arnaldo Otegi, avisó el pasado 20 de diciembre que era la hora de dar "un salto cualitativo" en la movilización por el traslado de los reclusos a cárceles vascas o de su entorno. Tras las huelgas de hambre llevadas a cabo por los propios presos y por parlamentarios vascos y navarros a principios de noviembre, Otegi demandó a los otros partidos "mayores niveles de compromiso". Finalmente, la convocatoria del paro del próximo día 27 se produjo el pasado sábado a pesar de saber que ni el PNV, ni EA, ni IU, ni casi con toda seguridad el sindicato mayoritario, ELA -además de CCOO y UGT-, iban a secundarlo.

La determinación unitaria de HB, adoptada también al margen de plataformas como Batera, en la que también están el PNV, EA e IU, hacen pensar a los otros partidos nacionalistas que se trata de una respuesta interna a la fuerte presión que están ejerciendo los colectivos de apoyo a los presos, como las Gestoras pro Amnistía y Senideak, e incluso los propios reclusos. Precisamente ayer, varios de estos grupos concluyeron sus huelgas de hambre con manifestaciones en Vitoria, Bilbao, Mondragón (Vizcaya) y Pamplona.

El portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Iñaki Anasagasti, declaró ayer que la decisión de HB "es una huida hacia adelante y la precampaña de HB en favor de la abstención activa" en las elecciones de marzo. A su vez, el número dos de EA, Rafael Larreina, cree que los nacionalistas tienen que dar una respuesta al inmovilismo del Gobierno español y el francés, pero discrepa de que la mejor vía sea el paro. Una opinión similar a la del coordinador de IU, Javier Madrazo, quien emplazó a los partidos a adoptar iniciativas originales de protesta contra las políticas "de hielo" de Francia y España en un asunto sobre el que "la sociedad vasca ya se ha posicionado en numerosas ocasiones".Las ejecutivas de estas tres formaciones estudiarán en sus próximas reuniones la puesta en marcha de medidas de presión en favor de los presos, las cuales se sumarán a las institucionales adoptadas a finales de 1999 y que para HB son insuficientes.

La última iniciativa en este sentido se produjo el 9 de diciembre, cuando la comisión vasca de Derechos Humanos solicitó una entrevista con el ministro del Interior, Jaime Mayor, y con las máximas autoridades francesas para pedirles el fin de la dispersión de los reclusos.

Antes, el 9 de enero del pasado año, todos los partidos de Lizarra participaron en una gran manifestación en favor de los presos y el 12 de abril el Gobierno vasco paró cinco minutos dentro de una convocatoria de una hora efectuada por los nacionalistas. Desde entonces sus dirigentes han participado en manifestaciones y todo tipo de actos.

Los europarlamentarios del PNV-EA y EH incluso intentaron visitar en París al etarra en huelga de hambre José Javier Arizkuren, Kantauri, y fueron retenidos temporalmente por los agentes franceses.