Los vecinos denuncian ante el fiscal el derribo de edificios en Ciutat Vella

La asociación vecinal La Boatella ha denunciado ante la Fiscalía la demolición de edificios y las actuaciones urbanísticas que se están realizando en el casco antiguo de Valencia para que investigue si pueden ser constitutivas de un delito contra el patrimonio histórico. Los vecinos, que ayer celebraron una concentración de protesta, aseguran que se está infringiendo la ley al demoler edificios protegidos. Pero los responsables de los derribos alegan que las fincas derribadas tienen "un escaso nivel patrimonial".

Varias decenas de vecinos del barrio de Velluters se concentraron ayer a mediodía con pancartas ante los escombros de los edificios históricos derribados por las excavadoras.Los vecinos denuncian que el descontrol de los derribos ha provocado una "oleada de pillaje para arramblar con las tuberías de plomo, las maderas, los cables eléctricos...". Un "caos" que algunos han aprovechado para entrar a robar en las fincas que no han sido expropiadas, como la de Juana López Toledo, de 87 años. A esta anciana enjuta le han robado hasta los vales de Cáritas. Pero lo que más le duele es la sustracción del retrato de su nieto, ya fallecido. Algunos, como Enrique Díez, llevan cuatro días sin agua potable "por culpa de los derribos" y otros, como Guillermo, están alarmados por la grieta que recorre su fachada y se ensancha "al ritmo que marca la excavadora que derriba la finca contigua".

El presidente de los vecinos, Denis Tsaousoglou, dijo que, como carecen de recursos para entablar una batalla judicial, han puesto los hechos en conocimiento de la Fiscalía para que "persiga de oficio a los autores de este atentado contra el patrimonio". En cambio, el director de la Oficina RIVA (Rehabilitació Integral de València Antiga), César Jiménez, dijo que no han infringido la ley y que las fincas derribadas tenían un escaso valor.