El River, campeón de la Liga argentina

Tanta expectativa para tan poco tiempo de incertidumbre. Antes de los tres minutos el pibe Saviola ya había perdido dos goles, y a los 39 de la primera parte el River pasaba a ganar el partido frente al San Lorenzo -y el torneo Apertura de la Liga- con el gol de Guillermo Pereyra, de 19 años, uno de los juveniles que Ramón Díaz ha llevado a la titularidad. Al River le bastaba con el empate y fue ganando durante casi todo el partido, pero el título -el número 28 de su palmarés local- llegó con algo de suspense: en los minutos finales del partido Bernardo Romeo empató para el San Lorenzo y los aficionados del Rosario Central -equipo donde juega el internacional español Juan Antonio Pizzi-, que había ganado su partido frente al Vélez, pensaron durante un minuto que el milagro era posible.Pero no. El River, con susto e incidentes (el encuentro estuvo suspendido más de diez minutos por las bombas y petardos que lanzaban los aficionados del San Lorenzo), hizo su trabajo y es otra vez campeón, cerrando una década triunfal en la que ha conseguido nueve títulos locales. El Boca, que había ganado los dos torneos anteriores, no pasó del empate en casa frente al Talleres de Córdoba, y acabó tercero. Los hinchas de River, felices por la nueva conquista y el fracaso de su tradicional rival, no cesaban de cantar: "Un minuto de silencio, para Boca que está muerto".

El River fue el mejor equipo del torneo sin discusión. Le sacó la luz de ventaja al Boca en el duelo entre ellos y la mantuvo hasta el final. El gran mérito del entrenador Ramón Pelado Díaz, ex jugador y goleador del club, fue haber limpiado la plantilla de históricos para dar oportunidades a los pibes de la extraordinaria cantera que tiene el River. De allí salieron el mediocampista Pereyra, el media punta Aimar y el delantero Javier Saviola, que con el gol que conquistó ayer acabó el torneo como Pichichi con 15 goles, uno más que Martín Palermo y dos más que Pizzi.