Un cambio de lindes del PTA en el plan urbano de Villalobos evita la expropiación a un ex edil popular

El ex concejal del PP en Málaga Federico Beltrán consiguió después de la llegada de su partido a la alcaldía en 1995 evitar que una finca de su propiedad fuera expropiada para la ampliación del Parque Tecnológico, cuando ya existía resolución definitiva e incluso estaba depositado el justiprecio. Pese a las numerosas alegaciones desestimadas y a que el parque pidió que no se alterara su zona de reserva, el Plan General de Ordenación Urbana aprobado en diciembre de 1996 excluyó la finca de Beltrán de esta ampliación, pero no las otras nueve parcelas afectadas que sí han sido expropiadas.

La delimitación poligonal de la zona de reserva del Parque Tecnológico de Andalucía (PTA) fue aprobada en pleno municipal el 10 de diciembre de 1991 cuando era presidido por el socialista Pedro Aparicio. El polígono 4 incluía 10 fincas que debían ser expropiadas forzosamente, entre ellas la de Beltrán, denominada El Huevero, de 105.000 metros cuadrados de superficie, y otra de 1.450 cuadrados que vendió un año antes a un agricultor. Beltrán, que era entonces concejal del PP, fue curiosamente el único de los 10 afectados que no presentó alegación contra la expropiación, aunque sí contra el justiprecio, 14 millones de pesetas, que resultó desestimada.El 22 de diciembre de 1994 se produjo la aprobación definitiva en pleno tras conocer un escrito de la dirección del PTA en el que reconocía que de momento sólo necesitaba de la finca El Huevero para su primera ampliación 22.050 metros cuadrados, pero que no renunciaba al resto. "No se pretende ni se pide la modificación de los límites del expediente de delimitación poligonal, cuya aprobación inicial se produjo el 20 de diciembre de 1991", rezaba el escrito del parque. El 4 de marzo de 1996 la delimitación del PTA se publica en Boletín Oficial de la Provincia de Málaga, con lo que se convierte en acto "definitivo en vía administrativa", contra el que sólo cabía recurso contencioso-administrativo que Beltrán nunca presentó.

Proyecto residencial

En junio de 1995, Celia Villalobos accedió a la alcaldía y decidió realizar una nueva aprobación inicial del PGOU en lugar de asumir la ya aprobada por la corporación anterior. En noviembre de aquel año, Beltrán presentó una alegación para que en la revisión del plan quedara excluida su finca de la zona de reserva del PTA, pero fue desestimada. En el escrito presentado entonces, Beltrán proyectaba construir en la finca 250 viviendas. En marzo de 1996 vuelve a presentar otra alegación y pide que Hacienda Federico, nuevo nombre de la finca, sea calificada de suelo residencial, pero nuevos informes técnicos aconsejan desestimarla.

El 17 de abril, Beltrán pide que se paralice el proceso expropiatorio hasta que concluya la revisión del PGOU, pretensión a la que sí accedió el pleno. Diez días después, el Boletín la Provincia publicó el anuncio de la expropiación de los 22.050 metros cuadrados de Hacienda Federico necesarios para la ampliación del PTA. Pese a ello, el equipo de Gobierno excluye la totalidad de la finca de la zona de reserva en el documento del PGOU que se somete a aprobación provisional en junio de 1996 y en la definitiva, votada por los ediles de PP y PSOE en diciembre. El PTA no fue consultado sobre la modificación.

Tres años después, la expropiación no se ha ejecutado, pero el expediente no se ha archivado, como sería consecuente con el vigente PGOU. Varios documentos posteriores de la Gerencia de Urbanismo revelan cierta confusión, ya que en unas ocasiones la finca es considerada zona de reserva del PTA y en otras aparece excluida.

El pasado viernes, el consejo de Urbanismo aprobó una licencia para la ampliación de la vivienda de Beltrán con un presupuesto de 26 millones de pesetas. Federico Beltrán, que es amigo personal de Villalobos, es propietario de la empresa de productos cárnicos Famadesa, fue concejal entre 1987 y 1995 y presidente del Málaga C.F. hasta hace dos años. La finca está calificada ahora de suelo no urbanizable de regadío.