La plantilla del Atlético se distancia de Ranieri por sus ataques

La plantilla del Atlético se distancia de su entrenador. Las duras palabras de Ranieri tras el horroroso partido ante el Wolfsburgo han sentado muy mal a los jugadores. El técnico se declaró inocente de la crisis del equipo y cargó contra los jugadores, a los que despreció. Santi, uno de los capitanes, fue claro ayer: "No me han gustado, no nos dejó en muy buen lugar. Pero cada uno es responsable de lo que dice".

La victoria del jueves frente al Wolfsburgo, que otorgó la clasificación para los octavos de final de la Copa de la UEFA, ha dejado heridas en el Calderón. Después de un partido malísimo, al que sólo acudieron algo más de mil espectadores, los ánimos no eran los mejores. Explotaron en la sala de prensa, donde Ranieri se despachó contra los jugadores, y en los pasillos del estadio, donde el presidente Jesús Gil recomendó, para motivar a sus jugadores, que se sometieran a intensas sesiones de material pornográfico."Esto es lo que hay, es difícil que hagamos algo más", dijo Ranieri el jueves, y la plantilla no encajó bien sus palabras. "No me han gustado", reconoció ayer Santi, uno de los capitanes. Sorprendió su respuesta por su talante habitualmente conciliador. Ayer, por una vez, Santi no disimuló su enfado.

Ranieri no ha dado explicaciones a los jugadores por sus declaraciones. "Han sido bastante fuertes, pero cada uno es responsable de lo que dice, cuando lo dice y a quién se dirige", señaló Santi.

El entrenador italiano insiste una semana más en su política de criticar en público a sus futbolistas y desmarcarse de cualquier responsabilidad personal. Su coartada, sostiene, es un intento de "pinchar" a la plantilla para motivarla ante la adversidad. Pero, de paso, insinúa que ninguna culpa es suya. Ni de sus planteamientos, ni de su elección de jugadores a la hora de confeccionar la alineación.

Santi, el único futbolista que accedió a hacer declaraciones ayer, el portavoz del grupo, dio a entender que el truco dialéctico de Ranieri no les agrada. "Este equipo no es tan malo, hay muy buenos jugadores", respondió Santi, quien dio a entender que los ataques de Ranieri no son sólo contra los jugadores, "sino también contra la entidad".

En medio de este clima de crispación, el Atlético vuelve mañana, contra el Valencia, al calvario de la Liga, donde es el equipo que más goles ha recibido y está a dos puntos del descenso. Los camerinos del Calderón empiezan a oler a pólvora.