Fallece a los 42 años en Mallorca el artista grabador Magí Baleta

El grabador catalán Magí Baleta falleció el pasado día 5 en Mallorca poco después de las 11.00 horas en un trágico accidente. El artista, de 42 años, se precipitó al vacío en el mirador d"Es Grau, situado entre las localidades isleñas de Andratx y Estellencs, lugar al que había ido a pasear con su hija, de siete años. Por el momento, se desconocen las causas de la caída.Baleta estaba pasando unos días de descanso en la isla de Mallorca, donde había presentado en público el pasado 29 de noviembre su última obra, Som l"altre, un libro realizado conjuntamente con el escritor mallorquín Biel Mesquida.

El grabador poseía un prestigioso taller en el Raval de Barcelona, que tenía como clientes y colaboradores a artístas plásticos de categoría, como Antoni Tàpies -a la familia del pintor le unía una gran amistad personal-, Antonio Saura, Jaume Plensa, Miquel Barceló y Joan Brossa. En los últimos años, Baleta había trabajado también muy estrechamente con un afamado taller de grabados mallorquín, llamado 6a.

Noble y humilde

Biel Mesquida definió ayer a Magí Baleta como "un hombre noble y humilde". Dijo de él que era "un gran lector de poesía", y explicó que fue el artista el verdadero impulsor del libro que realizaron al alimón. El escritor destacó como característica profesional de Baleta el haber sabido aunar "la sabiduría artística y la científica, de la técnica" en sus grabados.

El lugar donde Baleta perdió la vida es un punto frecuentado por cientos de turistas todos los días. Al mirador d"Es Grau, construido en 1913, se llega a través de una empinada escalera de piedra.