_
_
_
_

La reunión con Arzalluz servirá a Almunia para sopesar una nueva estrategia en el proceso de paz

Luis R. Aizpeolea

La entrevista que celebrarán antes de fin de mes -probablemente el día 23- el secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, y el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, servirá al líder socialista para decidir si mantiene su actual estrategia sobre el proceso de paz en Euskadi o se replantea algunas de sus consideraciones. Almunia acudirá a esta cita con la expectativa de recuperar las relaciones con el PNV, con el que el PSOE había colaborado históricamente hasta que en la primavera de 1998 decidió abandonar el Gobierno vasco precisamente por el acercamiento de los nacionalistas a HB y el entorno de ETA.

El grupo de dirigentes del PSOE encargado de seguir la evolución de la tregua de ETA y el proceso de paz se reunió ayer por la tarde, presidido por Almunia, para analizar la situación política del País Vasco. En el encuentro, al que acudieron el secretario de Política Autonómica, Ramón Jáuregui; el secretario de Comunicación, Alfredo Pérez Rubalcaba; el ex ministro de Justicia e Interior Juan Alberto Belloch, y el secretario general del Partido Socialista de Euskadi, Nicolás Redondo Terreros, se analizó la delicada situación que se vive en Euskadi tras el último cruce de cartas entre el Gobierno y ETA.Coincidiendo con el endurecimiento de las exigencias de la banda al Ejecutivo de José María Aznar, los socialistas aprecian una radicalización de las posiciones de EH, que, en su próxima asamblea, en la que renovará a su Mesa Nacional, va a apostar por un modelo soberanista inspirado en el de la provincia canadiense de Quebec. Y a ello se suman las disidencias internas en el PNV, formación que, en cualquier caso, ya ha advertido de que no está dispuesta a ir a rueda de EH en sus pretensiones rupturistas con el Estado.

La actual incertidumbre que plantea la tregua indefinida de ETA y la política de enfrentamiento de los bloques nacionalista y no nacionalista preocupa en el PSOE por lo que tiene de deterioro social y, además, de desdibujamiento político tanto de los socialistas como del PNV, frente al reforzamiento de los polos más enfrentados, el PP y EH. En este aspecto, existe ahora una clara complicidad de intereses entre el PNV y PSOE, que se abordará en el encuentro entre Almunia y Arzalluz.

Pero en ese contexto, analizado ayer por el PSOE, el primer partido de la oposición mantiene, por el momento, su actual estrategia de "firmeza democrática", en la que coincide básicamente con el Gobierno de Aznar. Una estrategia consistente en acompasar la política penitenciaria a los avances que vayan asumiendo ETA y su entorno en el proceso de paz.

No obstante, algunas voces en el seno del PSOE, sobre todo las de los socialistas vascos, apuntan la conveniencia de dar un giro más audaz en la política penitenciaria que sirva para rebajar la presión política sobre el PNV y los sectores más renovadores de EH y que alimente decididamente el proceso de paz. El propio Almunia, en su reciente estancia en París, ya apuntó su disconformidad con parte de la estrategia del Gobierno de Aznar e insinuó que en un momento dado podría manifestarlas.

Sin posiciones prefijadas

Ayer no fue ese día y en el encuentro con sus colaboradores se limitó a recoger impresiones, desde distintas perspectivas, sobre la situación del País Vasco. Almunia prefiere, en primer lugar, esperar a su cita con Arzalluz para conocer de primera mano las expectativas y las pretensiones del líder nacionalista. "No va a ir a la reunión con posiciones prefijadas. Una posición inflexible del presidente del PNV reafirmaría al secretario general del PSOE a mantener su actual estrategia", indicaron en el PSOE.Sin embargo, si Arzalluz planteara a Almunia posiciones más flexibles sobre el ideario del Pacto de Lizarra -basado en el apoyo al denominado "ámbito vasco de decisión"- y sobre el proceso de paz, el líder socialista podría animarse a respaldar en el seno de su partido las posiciones de los que creen que se debe presionar al Gobierno de Aznar para que flexibilice su política penitenciaria. En este sentido, el PSOE podría desempeñar un papel mediador con el Gobierno del PP. Hasta ahora, los peneuvistas han respondido con acidez, por parecerles muy insuficientes, a los acercamientos de presos puestos en marcha por Interior.

Los socialistas tienen muy claro, en cualquier caso, que no van a admitir que se planteen contrapartidas políticas a cambio del cese definitivo de la violencia de ETA.

Junto a esto último, otra cuestión que enrarece hoy por hoy las relaciones del PSOE con los nacionalistas es la doble política del PNV: la de confrontación con el PP en Euskadi y de acuerdo en el Congreso de los Diputados.

Los peneuvistas, por su parte, acudirán al encuentro con la expectativa de aprovechar las posibilidades que les pueda ofrecer el candidato socialista a la Presidencia del Gobierno una vez que con el PP han llegado a un punto muerto. "Todas las vías con el PP están rotas", dijo ayer Anasagasti. "Del proceso de paz no hay manera de hablar. Aznar no contesta a las preguntas sobre los presos. No anuncia acercamientos y continuamente está diciendo que esto es la ofensiva de los nacionalistas", añadió.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_