Dos pilotos por un título

El Campeonato del Mundo de F-1 toca a su fin. La última prueba, decisiva para el desenlace, se disputaba esta madrugada (6.00) en el circuito de Suzuka en Japón. Sólo aspiraban al título Irvine y Hakkinen, y Schumacher se insinuaba como juez. La jornada previa fue viva en sorpresas e incidencias. Ferrari puso en funcionamiento su nuevo motor 048C y eso permitió una mejora tan sustancial en el rendimiento de sus pilotos, que el alemán Michael Schumacher logró el mejor tiempo de los entrenamientos, y se colocó por delante de los dos McLaren Mercedes de Mika Hakkinen y de David Coulthard en la parrilla de salida. Irvine, con problemas de estabilidad en la parte trasera de su coche toda la jornada, sufrió un aparatoso accidente del que salió ileso. Hizo el quinto mejor tiempo, por detrás del alemán Heinz Harald Frentzen (Jordan Mugen Honda).Ayer, Schumacher puso la primera piedra para poder llevar a cabo la estrategia marcada por su equipo de ganar la carrera de Japón. Su victoria sería la mejor ayuda que podría ofrecer su compañero de equipo Irvine, que superaba en cuatro puntos al finlandés Hakkinen antes de iniciarse el GP de Japón. La exhibición de Schumacher, debía permitirle convertirse en juez del duelo por el título.

Durante los últimos entrenamientos, Hakkinen tuvo que salir de la pista para evitar un choque con el francés Jean Alesi, que le adelantó a la salida de una chicane. "No hay palabras para describir mi sorpresa", dijo. "Sentí rabia porque me estaba jugando el mejor tiempo".

Pedro de la Rosa y Marc Gené cayeron hasta las penúltimas posiciones. De la Rosa fue, además, multado con 775.000 pesetas por haber circulado por boxes a 97 km/h. en vez de los 80 km/h. establecidos.