Mestalla, indignado con los colegiados

La afición de Mestalla no dejó pasar ayer una al árbitro y sus asistentes harta de que aparecieran a lo largo del encuentro de ayer los fantasmas de los errores de los colegiados sufridos en la primera ronda de la liguilla en los partidos jugados en Múnich y Eindhoven. Así, recurrieron a los pitidos y los pañuelos a la mínima que saltaban como resortes los banderines de los jueces de banda.Las mayores quejas, sin embargo, se concentraron en una caída de Ilie en el área en el minuto 25 de la primera parte y en el pitido final de la primera parte, que coincidió con una galopada de Claudio Piojo López perseguido a duras penas por un defensa alemán, mientras el delantero valencianista se disponía a enfrentarse al guardameta Kahn. Ambas jugadas las mantenía fresca la afición valencianista en sus retinas. Precisamente un penalti a Ilie no señalado en el partido contra el PSV en Holanda y el precipitado final señalado por el italiano Cesari, cuando Piojo encaraba la portería alemana en Munich privaron al equipo de Héctor Cúper de dos posibles victorias que le hubieran dado el pase a la siguiente ronda.

Con el empate de ayer, ningún equipo alemán ha ganado nunca en Mestalla. El Bayern, además, fue vapuleado en septiempre de 1996 por un Valencia que vivia bajo el pulso que mantenían Luis Aragonés y Romario. Precisamente en este partido, el técnico madrileño no convocó entonces al carioca, lo que abrió las puertas de su salida del Valencia.

Un rotundo 3-0 en la primera ronda de la Copa de la UEFA dejó en la cuneta las aspiraciones del equipo alemán de seguir en la competición europea. Dos supervivientes de aquel encuentro, Piojo López y Lothar Matthäus volvieron a verse las caras ayer con distinta suerte. El del defensa aleman es el 93 encuentro en competiciones europeas.

El Valencia lleva siete años sin perder en su estadio en competición europea, desde que perdió 1-5 ante el Nápoles de Ranieri y del delantero uruguayo Daniel Fonseca.