_
_
_
_

La juez dicta prisión por asociación ilícita para 14 de los jóvenes que arrasaron las calles de Barcelona

La juez de guardia de Barcelona acordó anoche la prisión provisional para 14 de los 22 jóvenes que fueron detenidos el pasado martes por causar graves destrozos en el barrio de Sants y a los que ayer tomó declaración durante todo el día. La juez adoptó esta decisión después de oír al fiscal, quien acusó a estos 14 detenidos de asociación ilícita, desórdenes públicos, daños contra la propiedad, atentado y lesiones por los incidentes ocurridos durante una manifestación. Por otra parte, dos encapuchados lanzaron en la madrugada de ayer dos cócteles mólotov contra una oficina bancaria en Mataró.

La manifestación de la Plataforma Antifascista congregó el martes pasado a unos 600 jóvenes en el barrio de Sants, de Barcelona. Pretendían llegar a la plaza de los Països Catalans, donde cada año se reúnen grupos ultraderechistas convocados por la Alianza para la Unidad Nacional (AUN), el partido liderado por Ricardo Sáenz de Ynestrillas, con motivo del Día de la Hispanidad. La intervención de la policía impidió que ambas concentraciones se cruzasen, pero no que se desataran violentos enfrentamientos entre los agentes y los integrantes de la Plataforma Antifascista, que engloba a jóvenes anarquistas, comunistas, independentistas radicales y okupas. 26 jóvenes fueron detenidos y tres policías resultaron lesionados.Tres de los 26 detenidos tenían menos de 16 años, por lo que fueron puestos a disposición de la fiscalía de menores. El resto pasaron ayer a disposición de la magistrada Remei Bona, titular del Juzgado de Instrucción número 28 de Barcelona, excepto Jordi Batlle Neira, de 18 años e hijo del concejal socialista del Ayuntamiento de Barcelona Albert Batlle.

La policía asegura en su atestado que Jordi Batlle fue detenido por "proferir palabras injuriosas" contra los agentes cuando estaban deteniendo a su novia, "al tiempo que tiraba de ella para intentar impedir que la detención se llevara a efecto".

La chica, Joana R. V., es uno de los seis detenidos que ayer pasaron a disposición judicial y que tienen entre 16 y 18 años. A todos ellos la juez aplicó la atenuante de minoría de edad y quedaron en libertad con cargos. Otros dos detenidos mayores de 18 años también quedaron en libertad. Los jóvenes encarcelados tienen entre 18 y 27 años.

El atestado policial entregado ayer al juzgado asegura que "desde el comienzo de la manifestación" agentes de paisano siguieron a los jóvenes y constataron "que muchos de los manifestantes iban encapuchados y perfectamente organizados". También se afirma que los manifestantes "se distribuyeron entre ellos para causar destrozos al mismo tiempo que otros vigilaban en los cruces de las calles adyacentes para detectar la presencia policial".

La policía explica igualmente que algunos de los detenidos mostraron "una conducta especialmente agresiva y violenta" y se enfrentaron a los agentes montando barricadas, quemando contenedores y lanzándoles todo tipo de objetos. Los agentes aseguran que a una de las detenidas, precisamente a Joana R. V., se le intervino un trozo de adoquín de 15 centímetros, y a otro, una barra de hierro de unos cincuenta centímetros de longitud.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Durante los enfrentamientos con la policía, los jóvenes destrozaron también los vidrios de varias entidades bancarias y las marquesinas de los autobuses. La policía acusa a los detenidos de asociación ilícita, desórdenes públicos, daños contra la propiedad, atentado y lesiones.

La versión policial contrasta con las opiniones de los abogados defensores de los jóvenes detenidos, quienes coincidieron en calificar de descabellada la acusación de asociación ilícita. Los letrados afirman que entre los detenidos no existen fines comunes e ilícitos que justifiquen esta acusación y aseguran que muchos de los detenidos ni siquiera se conocen entre ellos, por lo que difícilmente se les podía acusar de asociación ilícita. En este sentido, un de los abogados recordó que su cliente, de origen marroquí pero nacionalizado español, apenas lleva tres meses viviendo en Barcelona.

Artefacto en Mataró

Por otra parte, dos encapuchados lanzaron dos cócteles mólotov la madrugada del jueves en una oficina bancaria de la Caixa de Catalunya de Mataró, causando importantes daños materiales. La policía considera que los autores de los hechos podrían estar relacionados con los disturbios protagonizados por la Plataforma Antifascista. Del mismo modo, los investigadores estiman que esta acción vandálica también puede ser un efecto mimético del lanzamiento de cuatro artefactos contra el domicilio de una concejal del Partido Popular de Cornellà, en el área metropolitana de Barcelona, ocurrido el pasado miércoles.Una de las principales pruebas de las que disponen los investigadores en la acción de Mataró es la filmación de la cámara de seguridad instalada en la entrada de la oficina bancaria, en la que se puede ver cómo los encapuchados entran y lanzan artefactos incendiarios en la cancela donde está instalado el cajero automático. Un tercer cóctel mólotov explotó en la acera frente a la oficina, que está situada en la avenida de Puig i Cadafalch, en el barrio de Cerdanyola, en Mataró.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_