La prensa internacional destaca como ejemplar la reconstrucción del Liceo

Un ejemplo que imitar. Así ve de forma unánime la prensa internacional la reconstrucción del Liceo de Barcelona, en cinco años y medio, en las crónicas de la inauguración del coliseo lírico barcelonés. No hay críticas negativas para el nuevo Liceo, del que se destaca que ha conseguido convertirse en un símbolo de Barcelona, junto a los edificios de Gaudí, y en un orgullo de los barceloneses. La inauguración es aprovechada por la prensa italiana para avergonzar a las administraciones de su país por el caso del teatro de la Fenice de Venecia.

"El Liceo renace de sus cenizas". Con pocas variaciones, la prensa internacional titula así las crónicas de la inauguración del coliseo lírico barcelonés.Los principales diarios italianos han aprovechado la inauguración del Liceo para abochornar a las administraciones de su país por la pasividad y los enfrentamientos que mantienen al teatro de la Fenice, tres años después de su incendio, en un cúmulo de ruinas.

Así renace un teatro. ¿Y la Fenice? Con este título encabeza Il Corriere della Sera la crónica de la inauguración del teatro barcelonés. "El Liceo ha renacido. Ha renacido de las cenizas, pero no por ello utilizaremos el símbolo de la Fenice, vistas las connotaciones vergonzosas que el noble pájaro, transformado en nombre de un glorioso teatro incendiado que continúa en ruinas, supone para nosotros". El artículo califica Barcelona de gran capital europea, define al Liceo como el "emblema" de su sociedad y destaca que las administraciones españolas y catalanas, junto con las empresas mecenas y la generosidad de los ciudadanos, han conseguido reconstruir el teatro.

"Una lección de civismo que recibimos y apreciamos". Así concluye el artículo de La Repubblica y que bajo el título ¿Por qué se suicida al final? destaca la normalidad con la que el Liceo se ha inaugurado. "No se ha querido una ceremonia solemne, se ha preferido una velada normal. Internacional, cierto, española y catalana, pero nada más. Como si recuperara la temporada que el incendio interrumpió hace cinco años". Tras calificar la representación de Turandot inaugural de "espectáculo de gran clase", el diario italiano se pregunta por qué Núria Espert ha optado por hacer que Turandot se suicide al final. "La única razón por la que Turandot podría suicidarse es la de tener que cantar la horrible escena final compuesta por Franco Alfano tras la muerte de Puccini y no creo que esa sea la razón de Núria Espert".

"En la mayoría de las capitales culturales del mundo, la apertura de un teatro de ópera es un símbolo de privilegio. En Barcelona no. (...) Junto a la arquitectura de Gaudí y los cuadros de Picasso, el Liceo se ha convertido en un tótem para los barceloneses, en un símbolo de orgullo cívico", dice el Financial Times. El diario británico asegura que en la representación inaugural de Turandot "la estrella fue el propio teatro. Y el triunfo del nuevo Liceo es que tiene el mismo aspecto que el antiguo". (...) "A diferencia del Covent Garden, que reabrirá sus puertas dentro de dos meses y con una inversión para su reforma muy superior, el Liceo ha tomado fuerzas del desastre para regenerarse y convertirse en un teatro con armonía social y espíritu comunitario".

"Si la destrucción del Liceo por el fuego el 31 de enero de 1994 fue una pesadilla, la reapertura de este legendario teatro de ópera fue un despertar y encontrar que nada había cambiado", dice el New York Times. "Lo más sobresaliente de todo es el hecho de que el Liceo se ha levantado de sus cenizas en menos de seis años, algo que no han conseguido ni el teatro de la Fenice de Venecia ni el Covent Garden de Londres con su reforma". Sobre la velada inaugural, el rotativo estadounidense asegura que "las estrellas verdaderas de la noche fueron el edificio y quienes lo han hecho posible" y concluye afirmando: "Para los amantes de la ópera en Barcelona, la pesadilla ha terminado; el Liceo ha vuelto".

El diario francés Libération afirma que por una vez "el poder central y las autoridades regionales han olvidado sus diferencias políticas y con la contribución de destacadas empresas y bancos han financiado la reconstrucción del Liceo". El rotativo parisiense, que describe como armoniosa la recuperación de la vieja imagen del teatro y con tecnología del siglo XXI en el escenario, dice que los barceloneses esperan que por fin hayan acabado todas las maldiciones del teatro.