Un obrero fallece al precipitarse del balcón de una obra en San Fernando

El escayolista José Manuel Blanco Muñoz, de 26 años de edad, perdió ayer la vida en San Fernando (Cádiz) al precipitarse al vacío desde el séptimo piso de un bloque de nueva construcción en el que trabajaba. El accidente se produjo alrededor de la una de la tarde en un inmueble que la empresa constructora Arenal 2000 edifica en la avenida Al Andalus, a la altura de un descampado conocido como el Caserío de Leiza.Según algunos testigos presenciales, el fallecido no portaba el arnés de seguridad mientras trabajaba a gran altura. El edificio en obras tampoco estaba provisto de los reglamentarios quitamiedos (las redes que cuelgan de los andamios y que evitan la caída de cascotes a la vía pública). Los compañeros del fallecido aseguran que el accidente se produjo ya finalizado el turno de trabajo y mientras la víctima recogía las herramientas y se limpiaba las manos. Aunque otro motivo de extrañeza y bastante relevante para los obreros de la obra de San Fernando era la presencia del fallecido en uno de los balcones de la estructura, cuando su trabajo como escayolista se limitaba al interior de los pisos.

La siniestralidad laboral en el sector de la construcción se está convirtiendo en un gran problema. En lo que va de año, han muerto en Andalucía 46 personas en sus puestos de trabajo. Los sindicatos destacan que las empresas no siguen las directrices de la Ley de Prevención, con lo que los trabajadores se enfrentan a numerosos riesgos que, a su juicio, se deben únicamente al ahorro de los patronos en medidas de seguridad.

El pasado miércoles, los sindicatos UGT y Comisiones Obreras de Andalucía convocaron una huelga en el sector, precisamente, para protestar por los altísimos índices de accidentes en la comunidad. Según los sindicatos, el paro del miércoles fue un verdadero éxito y paralizó a cerca del 95% de las obras. La patronal, sin embargo, rebajó estas cifras y su consecuente impacto y aseguró que tan sólo el 20% de los 230.000 obreros convocados a la huelga hicieron caso del llamamiento de los sindicatos.