El líder del sector crítico de CC OO retoma el poder en la secretaría de Sevilla
Antonio Rodrigo Torrijos, cabeza visible del sector crítico de Comisiones Obreras en Andalucía, anunció ayer su regreso. Recuperará todos sus cargos gracias a una sentencia del Tribunal Supremo que anula los cuatro años de inhabilitación a los que le condenó el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Esto dará fuerzas renovadas a la corriente crítica del sindicato y podría dificultar la reelección del actual secretario general de Andalucía, Julio Ruiz.
Torrijos ni perdona ni olvida. Tres años después de abandonar su despacho como secretario general de la unión provincial de Sevilla, la más fuerte de CC OO en Andalucía, y ser expulsado como afiliado, Torrijos se presentó ayer en la sede del sindicato para anunciar su regreso y su intención de retomar los cargos que ocupó hasta su inhabilitación judicial. La cúpula directiva provincial le arropó a su llegada y se brindó con cava por el fin del proceso. Torrijos rompió a llorar mientras agradecía el apoyo de los miembros alineados a la corriente minoritaria, al sector crítico. Sin embargo, las concesiones al sentimentalismo apenas duraron unos minutos y Torrijos se metió rápidamente en harina. Anunció que su rehabilitación se traducirá en un cambio profundo en la organización, y supondrá: "El principio del fin del estado de excepción interno que se vive en Comisiones Obreras" que, según el veterano sindicalista, promueve el secretario general nacional, Antonio Gutiérrez, con el apoyo en Andalucía de Julio Ruiz. La refriega en el seno del sindicato ha provocado en estos últimos cuatro años un gran deterioro en las relaciones internas y un grave perjuicio a la imagen de CC OO. Ahora las fisuras pueden recrudecerse. Año de cambios El próximo año será clave. El 12 de abril se celebrará el congreso confederal, en el que abandonará su cargo Antonio Gutiérrez. Posteriormente, el congreso andaluz elegirá al secretario regional hasta el año 2004. La reelección de Ruiz podría complicarse por la recuperación de los críticos, que verían sus tesis apoyadas por los descontentos. Torrijos descartó ayer abanderar una candidatura alternativa aunque mostró su disponibilidad a apoyar a un hipotético oponente de Ruiz.
