Los ediles del PP de Elche se enzarzan en una nueva disputa

La designación de un funcionario de empleo volvió ayer a enfrentar a nueve concejales del PP de Elche con Fernando Vargas, portavoz del grupo municipal impuesto por la dirección provincial del partido. Finalmente, la designación de Manuel Torres, persona próxima a Vargas, según los críticos, quedó sobre la mesa al no contar con apoyo suficiente. Tras la trifulca, la designación del funcionario no pudo llegar a votación, y tendrá que esperar hasta que la mediación de la dirección provincial, solicitada por Vargas, resuelva el conflicto. El portavoz intentó trasladar a sus concejales las actuaciones que había llevado a cabo a lo largo de la semana, pero los nueve ediles díscolos, de los 12 que integran el grupo, no le dejaron, al tiempo que criticaron al número uno del partido por enterarse "por la prensa de los contactos que mantiene". El nuevo capítulo en el serial del enfrentamiento del PP no arroja síntomas de mejoría sobre el deteriorado estado de salud de los populares ilicitanos. Las dos facciones, una de ellas liderada por Vargas, que engloba a dos ediles afines al presidente local, Manuel Ortuño, mantienen posturas enfrentadas, y eluden cualquier contacto. La designación de un funcionario de apoyo es sólo una muestra de la estrategia de aislamiento en la que los concejales quieren defenestrar a Vargas, tras el intento fallido, hace dos semanas, de separarlo de la portavocía. Los contactos que el portavoz ha mantenido con el autodenominado grupo de expertos del PP de Elche, liderado por el presidente local, apuntan a la estrategia de Ortuño por influir en las decisiones municipales.