Rebajada la pena a un padre que maltrató a su hijo para que cuide de él
La Audiencia de Barcelona ha condenado sólo a dos años de cárcel a un hombre por romperle el fémur a su hijo de nueve meses de edad, al entender que una condena mayor -que implicara el ingreso en prisión del padre- podría "repercutir de forma negativa en su hijo, que podría verse privado de la asistencia" a la que el padre está obligado legalmente.A pesar de que el fiscal pedía penas de 15 años para el acusado, Juan Luis Homedes, y otros tantos para la madre del bebé, el tribunal únicamente condena al padre, que reconoció haber golpeado al niño por su actitud "sumamente renuente" a tomarse la merienda. Asimismo, la sentencia señala que el padre del bebé es una persona "social y laboralmente integrada" -reside con su esposa en uno de los barrios más caros de Barcelona- y alerta de las "graves consecuencias, tal vez irreparables", que podría suponer su ingreso en prisión.
El acusado reconoció haberle roto el fémur a su hijo en 1996 al golpearle como castigo por no querer comer. Cuando el niño fue atendido en el hospital, los médicos descubrieron que el bebé había sufrido otras fracturas anteriormente en el húmero, en la cabeza y las costillas, pero el tribunal señala que no puede probarse que el autor de las lesiones fuera el padre.
