Pino: "La montaña le hace pupa"

Álvaro Pino fue ayer protagonista de la jornada desde el principio hasta el final. No por su estrategia en la etapa, precisamente, sino por la falta de ella. Pino anunció que dejaba de atacar, que no movería un dedo en los Pirineos salvo para intentar el triunfo de etapa, que ya estaba harto de que fuera su equipo el único que movía pieza en esta Vuelta y otros sacaran provecho de ello. Y el Kelme no se movió, pero pasó lo que pasó, ante lo cual Pino se presentó en la meta reforzado en sus argumentos: "No se movía nadie y se ha soltado Olano, señal de que la montaña le sigue haciendo pupa. Creo que había terreno para hacer más cosas, pero si los demás no lo entienden así, yo no voy a seguir intentándolo. Pedimos montaña y la dejamos pasar, así se nos va a quedar cara de tontos. Ahora dirán que Olano no era tan líder. Pues bien, yo voy a seguir igual: vamos a jugar a ganar etapas". Sus colegas no quisieron entrar en la polémica. "¿Qué habríamos conseguido atacando de salida en una etapa como la de hoy?", contestó Eusebio Unzue, de Banesto. "Nosotros tenemos que jugar nuestras bazas, no ir en función de los demás". Tonkov se sintió sorprendido por lo sucedido. "Era un terreno idóneo para Olano. No me lo esperaba". Ullrich fue modesto: "Sigue siendo el favorito, pero tengo mucha ilusión por la etapa de mañana". Y Chava Jiménez se limitó a decir un enigmático "hay que esperar a ver qué pasa estos días". Eusebio Unzue describió a su manera la impresión predominante: "La carrera queda muy abierta para quienes se juegan la general". Y entre ellos Unzue no incluye a ningún corredor de los suyos. Sus objetivos siguen siendo, a lo que parece, las victorias de etapa.Olano achacó su retraso al viento y al trabajo de ir en cabeza toda la jornada. Manolo Saiz, su director, siguió el mismo tono: "Han sido sólo unos segundos, pero tendremos que actuar con mucho temple estos días. Vemos que algunos se han vuelto locos y no tienen la cabeza en su sitio". ¿Era una alusión a Álvaro Pino?