El PP proyecta multiplicar los aparcamientos en el centro vitoriano

VIENE DE LA PÁGINA 1 El Partido Popular presentó ayer el paquete de medidas sobre las que girará su política de urbanismo en los próximos cuatro años en el Ayuntamiento de Vitoria. El plan cuatrienal se basa en construir 11.014 viviendas para el año 2003, cerrar la ronda de circunvalación por el sur, multiplicar la oferta de aparcamientos en el centro de la ciudad, revitalizar los barrios construidos en los años del desarrollismo y poner fin a la dispersión de las oficinas municipales. Teniendo en cuenta estos ejes, el concejal de Urbanismo, Jorge Ibarrondo, pormenorizó alguna de sus intenciones. Tratará de coseguir la aprobación inicial del Plan General para finales de año. Para eso propuso concentrar a todos los concejales de la comisión de Urbanismo durante las dos últimas semanas del mes en un lugar retirado para debatir las 750 alegaciones presentadas al avance del Plan General. Ibarrondo quiere además renegociar el convenio que firmó el anterior alcalde, José Ángel Cuerda, con los propietarios particulares de Salburua y Zabalgana, las dos zonas por donde se extenderá la ciudad. "No quiero ni tirarlo a la basura [como propuso el PP antes de las elecciones] ni llevarlo a los altares", anunció. Ante todo, quiere obligar a los dueños a fijar plazos de ejecución de los 21.000 pisos que se construirán allí. En infraestructuras, el PP espera avanzar en el estudio para soterrar el ferrocarril a su paso por Vitoria, así como en su idea de construir un túnel para vehículos bajo el Casco Medieval. Para ello, Ibarrondo espera la colaboración del Gobierno central. "Una especie de Ramblas" El gobierno municipal también convocará concursos de ideas para revitalizar la plaza de Toros y la avenida Gasteiz, que quiere convertir en "una especie de Ramblas de Barcelona". Además, el PP incorpora una idea que choca con la corporación anterior y con la mayoría de los grupos de la oposición. Quiere multiplicar los aparcamientos en el mismo centro de la ciudad: bajo la Catedral Vieja, en Desamparados, el Palacio de Justicia, la actual estación de Renfe... Y ejecutarlos todos antes del año 2001. Este plan es criticado por varios grupos, en especial IU y EH, partidarios de potenciar más el transporte público. Los proyectos del PP encontraron mayor eco en el PSE, sobre todo en cuanto a la renegociación del convenio sobre el crecimiento de la ciudad. Aunque provocó reticencias acerca del alquiler y la financiación de las infraestructuras. El PP cree que algunas pueden costearse "al 80% por la Unión Europea". El PNV, segunda fuerza municipal, avanzó una oposición frontal. Su portavoz, María Jesús Aguirre, planteó una batería de preguntas y críticas que no encontraron respuesta. Y su compañero Avelino Fernández de Quincoces dudó sobre la aprobación del Plan General en los plazos previstos.