Las bolsas retroceden por la confusión derivada de los datos económicos

Las bolsas occidentales sufrieron ayer una importante caída, ante unos datos económicos que sólo generan confusión. En España, el crecimiento del desempleo en agosto coincide con unos resultados empresariales que suben por encima de lo previsto pero gracias a los beneficios atípicos, mientras que en Estados Unidos desciende la productividad laboral al tiempo que aumentan los costes. La Bolsa de Madrid perdió un 1,81% y las ganancias del año se reducen al 0,47%.

Los datos económicos no mantienen una trayectoria estable y los inversores reaccionan vendiendo sus títulos. Ayer, la Bolsa de Madrid caía el 1,81%, 16,08 puntos, y reducía sus ganancias anuales al 0,47%, 4,09 puntosLa presión al alza en los tipos de interés en los mercados de toda Europa cuestiona las declaraciones de los responsables del BCE sobre la estabilidad de los tipos oficiales para todo este año, al tiempo que, en España, el incremento del desempleo en agosto confirma que el proceso de creación de empleo se enfría a marchas forzadas. La subasta de activos a tres, 10 y 30 años, ofreció resultados desiguales, con variaciones mínimas en la rentabilidad a tres y 10 años, 4,27% y 5,27%, y una subida hasta rozar el 6% para el plazo más largo, cuya rentabilidad quedó en el 5,93%.

Los analistas han tenido tiempo de leer en profundidad el contenido de los informes sobre resultados empresariales y han decidido que el triunfalismo en su presentación trata de ocultar una abundante generación de "atípicos", beneficios debidos a la venta de activos, mientras que otras sociedades han hecho lo contrario, acumular gastos para ofrecer mejores datos en el futuro.

En Estados Unidos las cosas fueron peor, ya que las declaraciones de Edward Kelley, gobernador de la Reserva Federal, sobre lo "prematuro" que resulta asumir que el equivalente del banco central esperará a subir los tipos de interés hasta el año próximo y la afirmación de que este organismo se mantiene "intensamente vigilante" hacia la inflación provocaron una apertura en la que el índice Dow Jones de la Bolsa de Nueva York perdió 200 puntos.

La publicación de los datos sobre productividad laboral en el segundo trimestre, con una subida del 0,6% cuando se esperaba el 1,3%, y un aumento de los costes laborales del 4,5%, debido al mantenimiento del desempleo en niveles históricamente bajos, recordaron las recientes declaraciones de Alan Greenspan, que afirmó que la alta productividad había ayudado a mantener bajos los precios al consumo y que le preocupaban los costes laborales.

El aumento de los pedidos a fábrica en un 2,1% en el mes de julio redondeó una jornada en la que creció el temor a un nuevo ajuste al alza en los tipos de interés por el calentamiento de la economía. La reacción de la Bolsa de Nueva York arrastró a los mercados europeos, entre los que destacaba la caída de Francfort, del 2,39%. Londres perdió un 1,28% y París cerraba sin cambios. Los inversores también cancelaron sus posiciones a corto plazo en dólares en el mercado de divisas por el temor a una fase de turbulencias en torno a la moneda de Estados Unidos hasta que se conozcan en detalle los planes de la Reserva Federal.

La moneda estadounidense cayó en algunos momentos hasta 108,98 yenes y 1,07 euros. Al cierre de la sesión se ofrecían 109,15 yenes por dólar, mientras que se había recuperado ligeramente frente al euro, hasta 1,0690.