La futura multiestación de autobuses de Chamartín será subterránea y dispondrá de 66 dársenas

La estación de Chamartín contará en el futuro con un intercambiador de transportes de notable tamaño. El consejo rector de la Operación Chamartín, integrado por los responsables urbanísticos de la Comunidad y el Ayuntamiento, ha acordado la construcción de una estación en forma de espina de pez y con 66 dársenas para otros tantos autobuses. Las administraciones destinarán este espacio a las líneas de largo recorrido, mientras que los autobuses interurbanos seguirán partiendo de plaza de Castilla. En una primera aproximación al asunto, el consejero de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes, Luis Eduardo Cortés, había avanzado que "con unas 17 dársenas" sería suficiente para la futura multiestación, que aunará autobuses, trenes y metro (actualmente la línea 10; en el futuro, la 1 y, tal vez, la 4). Sin embargo, tanto Cortés como su equivalente en la Casa de la Villa, Ignacio del Río, han terminado decantándose por un proyecto con una capacidad cuatro veces mayor. En su mente se encontraba lo sucedido con el intercambiador de Moncloa (autobuses y líneas 3 y 6 de metro), que se ha quedado pequeño apenas cuatro años después de ser inaugurado.En una situación parecida se encuentran los 13 andenes para autobuses de plaza de Castilla, entre las torres KIO, que se abrieron al público el 21 de diciembre de 1994 y ahora ya se encuentran saturadas. Para solucionar este panorama, la Consejería de Obras Públicas ha encargado un anteproyecto para crear una nueva multiestación, esta vez subterránea, donde actualmente se encuentran las cocheras del metro. Se trata de la misma finca que el Gobierno regional ha cedido para la construcción del nuevo Tribunal Superior de Justicia al ministerio pertinente.

Los técnicos del Consorcio Regional de Transportes estudiaron la posibilidad de aunar en un solo intercambiador las futuras instalaciones de Chamartín y plaza de Castilla. La idea quedó finalmente descartada, porque muchos usuarios de plaza de Castilla tienen ahí su punto de destino y, en consecuencia, no necesitan cambiar de medio de transporte.