_
_
_
_
Entrevista:DAVID ETXEBARRIACICLISTA

"En esta profesión lo que importa al final es el dinero"

El mismo día que David Etxebarria se imponía en una etapa del Tour, el alcalde de Abadiño, su pueblo, no pudo reprimir un comentario que dejó perplejos a los asistentes a la boda que en esos momentos oficiaba. "Hoy tenemos un doble motivo de felicidad", aseguró sonriente: "La victoria de Etxeberria en el Tour y el enlace que nos ocupa". Días después, el pequeño ciclista del Once-Deustsche Bank (1,63 m), repetiría éxito en la misma prueba. El éxtasis absoluto. Una conmoción para un joven de 25 años que rompe con todos los estereotipos del ciclista español: es rápido, listo para ganar y no se encoge parapetado tras los tópicos a la hora de afrontar el vértigo de los micrófonos. Su carácter positivo ilumina un universo bajo eterna sospecha, compuesto de interioridades grises que él mismo reconoce: el dinero ha suplantado muchas ilusiones. Pregunta. Nunca se había visto a nadie hacer tantas payasadas sobre el podio del Tour ¿cómo le salió así? Respuesta. Todavía no me lo explico, se me debió de cruzar el cable. Fue tanta mi alegría y tan inesperada, que no pude controlarme. P. Y a su regreso a Abadiño no le importó ejecutar una espatadantza. Debería asesorar al resto de tus compañeros de pelotón para que aprendieran a vender mejor su deporte. R. Hacía lo menos diez años que no bailaba, porque de pequeño sí que practicaba. Cuando alguien es tímido no se le puede reprochar ese rasgo de su carácter. Yo soy abierto pero no nos dan clases para expresarnos, lo nuestro es pedalear. Ahora, reconozco que es importante que existan ciclistas que sepan explicar sus sensaciones, es bueno para el ciclismo, para venderlo. Muchos tienen miedo de que se les malinterprete. P. Cuenta que vivió momentos mágicos al ganar su primera etapa del Tour... R. Cuando vi la línea y a todos los fotográfos detrás, pensé "he llegado aquí y no sé qué reacción voy a tener". Veía toda la escena de forma borrosa, pero fue algo indescriptible. P. Sin embargo, durante el Giro no sentía ningún apego por el ciclismo ¿Qué ocurrió? R. Tuve un problema personal y no me apetecía montar en bicicleta. Manolo Sáiz [su director] me dijo que fuera a Italia para entrenarme. Estuve tres días y me recuperé. En casa salía a entrenar y no podía hacer 40 kilómetros seguido; allí hacía 200 a diario. P. Sólo había disputado antes el Tour de 1997 y aunque juró que lo acabaría se retiró sin fuerzas ¿qué ha cambiado desde entonces? R. Lo que ha cambiado es que he llegado muy fresco desde el punto de vista anímico y con ganas de sufrir. P. ¿Qué ambiente se vivía en el seno del pelotón con respecto al dopaje? R. El ambiente era de hastío. La mayoría prefería hablar sólo de lo relacionado con la carrera. P. ¿Qué le pareció la retirada de Bassons, el francés que aseguraba que el pelotón seguía dopándose mientras él iba a pan y agua? R. Tuvo que ser duro para él pero profesionalmente no lo hizo bien porque había otros en su equipo que querían correr el Tour. No hace falta decir que uno va limpio, los controles ya lo dicen. P. ¿Qué es para usted Jalabert? R. Un ídolo deportivo y un poco mi profesor. Somos amigos y siempre compartimos habitación cuando corremos juntos, cosa impensable cuando corría en aficionados y el era ya una figura. P. ¿Y Armstrong? R. La prensa se extraña ahora pero ya anunció mucho en 1998. No hay que mirarle de forma suspicaz. P. Parece que corre con rabia. ¿A qué se debe? R. Corro con rabia porque creo que no vale lamentarse después de cruzar la meta. P.: Un diario francés afirmó que corría con tantas ganas porque el ciclismo era su única manera de triunfar en la vida ¿No era un poco pesimista? R. ¿Ves? A eso me refería antes cuando hablaba de malinterpretaciones. El que escribió eso lo entendió al revés. Yo no pienso excesivamente en la bicicleta para ser un profesional. En cuanto me bajo la olvido. Hay muchas formas de triunfar en la vida. P. ¿Cree que Olano debería replanteaerse sus objetivos tras fracasar en el Tour? R. La gente no tiene que mirar sólo el Tour, debería ampliarse la cultura del público. La carrera francesa no lo es todo aunque te dé mucho. Creo que ni ahora soy tan bueno ni antes era tan malo. P. Dicen que a los ciclistas sólo les importa ganar dinero. R. Es cierto. Aunque yo trate de sentirme orgulloso de mis victorias o de mi trabajo, cuando cuelgas la bicicleta lo que te queda es el dinero que has ganado. ¿Quién se acuerda ahora de Gorospe o de Lejarreta? Preguntas en la calle por su palmarés y nadie es capaz de decirte qué ganaron, y ganaron muchas cosas, así que yo que no he ganado tanto pienso que al final solo me valdrá el dinero. P. El dopaje obedece entonces a motivos económicos. R. Por supuesto. Los que se dopan lo hacen por ganar más dinero. Es un reflejo de la sociedad. Otros que trabajan en empresas trepan para mejorar su categoría y ganar más. P. ¿Va a regalarse algo? R. Pienso sacarme el carné de moto y comprarme una Honda, aunque a Manolo [Sáiz] no le haga mucha gracia.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_