El actor Enric Arredondo lleva su vida al teatro con el monólogo "La bohèmia"
Enric Arredondo ha convertido su vida en una obra de teatro. El actor, y ahora también dramaturgo, estrena hoy en la sala Muntaner de Barcelona La bohèmia, un monólogo autobiográfico en tono humorístico que incluye poemas de William Shakespeare, Salvador Espriu y Miquel Martí Pol. Escrita e interpretada por él, la obra es también un retrato de la España del franquismo. Enric Arredondo lleva 40 años recorriendo escenarios y platós de televisión, pero hoy se enfrenta a su primera vez como dramaturgo. "Si como actor ya tengo miedo en un estreno, como autor es todavía peor", explicó ayer durante la presentación de la obra, incluida en el Grec. La bohèmia es un texto autobiográfico que surge de las reflexiones de Arredondo en una época en la que se sentía "enfermo y desanimado". Pero no es una obra dramática: "Un 90% está escrito con sentido del humor", dijo. El otro 10%, "más serio", se refleja en poemas de Shakespeare, Espriu y Martí Pol. El actor quiere mostrar la verdad de las cosas: "Yo toco un tema en tono de broma, entonces irrumpe en el escenario un soneto que muestra la verdad de lo que digo". Para la dirección, Arredondo buscó a Carme Portaceli. "Cuando Enric me enseñó el texto, me gustó porque iba más allá y era muy teatral", explicó la directora. Arredondo se le mostró con la vergüenza del primerizo: "No tenía nada que perder". A Portaceli, acostumbrada a textos menos intimistas, le gustó: "Creo que el lenguaje es muy poético y se acerca al ser humano". La bohèmia está pensada y escrita para ser interpretada en un espacio reducido. Sobre un escenario sencillo, Arredondo se enfrenta al público en un tú a tú en el que se desnuda como persona y cuenta intimidades y reflexiones que le han pasado por la cabeza desde los seis años. Es el repaso cronológico de la vida de un actor, pero Arredondo no habla sólo de su carrera: "Los actores somos teatrales; a menudo, vivimos la vida como en una novela, y eso se refleja en la obra, que podría haber sido más crítica con la profesión". El texto también dibuja un retrato de la dictadura española, que Arredondo conoce muy bien. Con la entrada, se entrega al espectador un sobre con fotografías que han impresionado a los integrantes del montaje, como la imagen de los tanques soviéticos entrando en Praga y la de un enfermo terminal de sida. La obra compartirá escenario en la sala Muntaner con Melinda on the rocks, de Manel Dueso, hasta el 1 de agosto.
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