Duran suaviza las críticas de CDC a la cena con empresarios

El líder de Unió Democràtica de Catalunya, Josep Antoni Duran Lleida, suavizó ayer las críticas de sus socios de coalición (CDC) a la cena organizada el pasado miércoles por Pasqual Maragall y agregó que no le preocupa que el candidato socialista organice este tipo de actos. "Muchos de los que asistieron no piensan votarle", subrayó a renglón seguido el dirigente democristiano, que asistió a la escuela de verano de UDC que ayer comenzó en Girona. Duran sí se expresó con dureza por "el estilo" del candidato socialista a la presidencia de la Generalitat, que no invitó al acto a todos los medios de comunicación. En este sentido, el líder de UDC aseguró que ahora empieza a entender en qué consiste "el cambio de los socialistas" propuesto por Maragall. En opinión de Duran, al candidato del PSC le importa más el envoltorio de un acto que su contenido. Asimismo advirtió de que su actitud con los medios pone en evidencia que si gana las elecciones "unos serán invitados -los suyos-, mientras que a los otros les hará pasar hambre". Por su parte, el consejero de Economía, Artur Mas, afirmó ayer, en alusión a Maragall, que el mundo empresarial catalán "no es sólo una élite", sino que se nutre fundamentalmente de pequeños y medianos empresarios "que tienen una buena imagen de CiU, contrastada incluso por algunas encuestas". Protesta de la JNC Por otra parte, un grupo de militantes de la Joventut Nacionalista de Catalunya (JNC), organización juvenil de CDC, acudió ayer a la oficina central de la candidatura de Pasqual Maragall, donde entregaron un ejemplar de cada periódico de ayer y el libro El miedo a la libertad, de Eric Fromm, en protesta por el veto a algunos medios de comunicación en la cena de empresarios del pasado miércoles. Maragall, que se encontraba en su despacho de la Oficina Ciutadans pel Canvi, no salió a recibir a la representación de la JNC, encabezada por su secretario general, Jordi Xuclà. Según Xuclà, la actuación del socialista denota "una excentricidad muy peligrosa para el funcionamiento democrático de este país". El dirigente de las juventudes nacionalistas calificó de "atentado a la libertad de información y de expresión" la decisión del equipo de Maragall de permitir que sólo seis periódicos pudieran acceder a la cena. "Parece que Maragall tenga cierta nostalgia de un Pravda a la catalana", apostilló Xuclà, en referencia al diario del comité central del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS). También recordó que en los trípticos informativos de Maragall éste se compromete a crear un consejo audiovisual independiente porque "el nuevo Gobierno sí que garantizará la libertad de información". En opinión del dirigente de la JNC, "los hechos niegan con rotundidad este llamamiento a la pluralidad" del candidato socialista.