Asunción se muestra dispuesto a agilizar los plazos para la investidura y la constitución del Consell

Eduardo Zaplana tiene prisa por constituir el cuerpo de la nueva Administración autonómica y espera que los nuevos cargos ocupen sus plazas de manera efectiva a principios de septiembre. El presidente ha mostrado especial interés por agilizar los plazos parlamentarios correspondientes a la sesión de investidura y la toma de posesión del nuevo Consell. Ayer recibió en el Palau de la Generalitat a Antoni Asunción, portavoz del primer grupo de la oposición parlamentaria, para tratar cuestiones de procedimiento que ambos acordaron acelerar. El dirigente socialista expresó su voluntad de cooperar para "acabar todo el proceso antes del mes de agosto". Pero ambos dirigentes recordaron que es necesario el acuerdo de Esquerra Unida para definir el calendario porque los primeros pasos de la legislatura exigen la unanimidad de todos los grupos parlamentarios. El acuerdo entre Zaplana y Asunción se extiende a los plenos correspondientes a la sesión de investidura, la toma de posesión del Consell, la elección de los miembros del consejo de administración de Ràdio Televisió Valenciana, la elección de los adjuntos al Síndic de Greuges -plazas vacantes desde hace varios meses- y la elección de los senadores territoriales. Tanto la elección de los consejeros de RTVV como de los adjuntos al Síndic de Greuges exigen un pacto entre populares y socialistas porque su elección en las Cortes requiere una mayoría cualificada. "Cuanto antes haya gobierno, mejor", comentó Zaplana, "con el resultado electoral sería una tontería dilatar los plazos". Asunción, por su parte, también expresó su confianza en poder "empezar a trabajar donde nos toca" a partir de septiembre. La posible reforma del Estatuto se abordó de forma muy genérica, según destacaron ambos dirigentes, y se aplazó su debate al próximo otoño. Asunción se mostró constructivo y restó importancia a las recientes declaraciones de José María Aznar, presidente del Gobierno, quien desestimó una modificación de la norma básica del autogobierno valenciano durante la celebración del reciente debate sobre el Estado de la Nación. El dirigente socialista fue entonces muy crítico hacia Zaplana, pero ayer se limitó a comentar: "Tenemos tiempo y buscaremos la unanimidad". Zaplana también hizo votos por una relación fluida con la oposición a lo largo de la legislatura que se inaugura oficialmente mañana con la constitución de las Cortes y aseguró que no utilizará su amplia mayoría parlamentaria como "un rodillo". "Algunas cuestiones no se pueden resolver por mayoría", dijo el presidente, "sino unanimidad. Ciertas cosas requieren el mayor consenso posible". El presidente también reiteró que acogerá tanto a "los dirigentes de partidos con representación parlamentaria, y por lo tanto los que cuentan con más apoyo electoral, como a los que no lo tienen porque los ciudadanos que han apoyado a esas fuerzas políticas están también en el derecho de encontrar cauce y canalización a sus propuestas y al diálogo". Un ofrecimiento que ya hizo público inmediatamente después de la jornada electoral del 13 de junio.