Azkuna y Elorza forman gobiernos provisionales en minoría hasta que se resuelvan los pactos

Iñaki Azkuna y Odón Elorza formaron ayer gobiernos provisionales integrados exclusivamente por concejales de sus respectivas formaciones (PNV-EA en Bilbao y PSE en San Sebastián) a la espera de formalizar los pactos que otorguen estabilidad a sus consistorios. En cambio, el nuevo alcalde vitoriano, el popular Alfonso Alonso, desistió de nombrar equipo de gobierno. En Pamplona todo está más claro porque, ante la probable decisión del PSN de no entrar en el gobierno, Yolanda Barcina ha integrado sólo a ediles de UPN.

Azkuna hizo público ayer, a través de cuatro decretos diferentes, el gobierno municipal en Bilbao con todas las características de transitoriedad, puesto que su coalición sólo cuenta con nueve de los 29 corporativos. El ex consejero de Sanidad ha pergeñado un equipo que incluye a todos los ediles nacionalistas, aunque queda claro que su mano derecha será Ibon Areso, el único teniente de alcalde nombrado y responsable de las áreas de Urbanismo y Obras y Servicio. Junto a él, los hombres fuertes serán el ex directivo de Osakidetza Iñaki Etxebarria, titular de Economía y Hacienda; Juan José Olabarria, de Protección Civil y Circulación, y Eusebio Melero, responsable de Bienestar Social y Recursos Humanos, y también procedente de Osakidetza. El equipo se completa con María Asis Fernández, en Empleo, Mujer y Medio Ambiente; José Manuel Uribarri, en Educación, Juventud y Deporte; José Luis Sabas, de Cultura y Turismo, y María Isabel Sánchez Robles, en Salud y Consumo. Azkuna se ha embarcado esta semana en negociaciones con todas las fuerzas políticas, aunque sólo dos pactos, y siempre con tres partidos, garantizarían mayoría absoluta: PNV-EA, junto a PSE e IU y, por otro lado, PNV-EA, EH e ICV, el partido del ex alcalde José María Gorordo. Otra opción matemática es un acuerdo con socialistas y PP, pero el PSE no está dispuesto a suscribirlo. El nuevo alcalde se ha manifestado favorable, antes y después de su elección, a reeditar el pacto PNV-PSE-IU que persistió en la parte final de la legislatura anterior "porque ha funcionado bien". Sin embargo, admite en privado que está condicionado por su partido y la configuración de alianzas en el resto de Euskadi. Su discreción sobre los contactos es tal que no ha querido revelar en qué orden mantendrá conversaciones con el resto de las formaciones. En San Sebastián, el alcalde Odón Elorza también ha formado gobierno en minoría sólo con los nueve ediles socialistas. Mantiene su invitación al PP y a la coalición PNV-EA para participar, pese a que tras la primera ronda los nacionalistas vascos rechazaron de plano la propuesta. Elorza tiene la intención de formar un gobierno lo más "amplio y plural" posible, aunque no descarta prolongar esta situación transitoria hasta el mes de septiembre. En el reparto de concejalías, Ramón Etxezarreta mantendrá la cartera de Cultura y además actuará como primer teniente de alcalde; Ernesto Gasco se encargará de Seguridad Ciudadana y Tráfico; Susana Corcuera, de Hacienda y Régimen Interno; Alberto Rodríguez ejercerá como adjunto de Vías Públicas, y los ex diputados Jorge Letamendía y Arritxu Marañón asumirán las delegaciones de Urbanismo y Juventud y Deportes, respectivamente. El resto de las competencias serán desempeñadas por el alcalde. Esta decisión, a la espera de ulteriores acuerdos con otros partidos, se justifica en el deseo de "garantizar la gestión diaria municipal". Mañana se celebra la primera comisión de gobierno con representación socialista exclusiva. Vitoria vive aún un momento de provisionalidad, informa Eduardo O. de Arri. A pesar de que Alfonso Alonso accedió a la alcaldía el sábado, todavía no ha repartido áreas de responsabilidad política a falta de poder conseguir mayores apoyos. Con los recibidos por su partido, el PP, y Unidad Alavesa en el pleno del sábado, aún posee una mayoría poco sólida: 11 concejales dentro de una corporación compuesta por 27 ediles. Alonso priorizó ayer las reuniones con los candidatos del PSE-EE y UA. Cuenta con un plazo legal de 30 días para nombrar concejales de áreas y formar la nueva comisión de gobierno. En Pamplona, la alcaldesa ha diseñado el que parece equipo definitivo, formado con ediles de UPN, y ha reducido las concejalías de nueve a seis, informa Mikel Muez.