_
_
_
_

Jáuregui viaja a Ceuta para imponer al partido el pacto anti-GIL con el PP

El pacto contra el Grupo Independiente Liberal (GIL) de Jesús Gil en Ceuta trae de cabeza al PSOE. Ayer, un día después de que el Comité Federal diera luz verde al acuerdo, la dirección socialista decidió enviar allí al secretario de Política Autonómica, Ramón Jáuregui, para garantizar su cumplimiento y evitar que el GIL logre la presidencia de la ciudad autónoma, tras la dimisión ayer de los dos concejales que el PSOE obtuvo en las elecciones del 13 de junio y de toda la ejecutiva del partido en Ceuta hace seis días.

La Comisión Permanente del PSOE, que se reunió ayer de forma no oficial, reconoce que hay dificultades para que los socialistas de Ceuta acepten apoyar al PP en esa ciudad autónoma tras las dimisiones de los últimos días. Con esta constatación, Jáuregui se desplazó ayer mismo a Ceuta para intentar salvar esas reticencias y garantizar la aplicación de los acuerdos aprobados el domingo por el Comité Federal. Según explicó el secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, "no parece posible ninguna excepción al acuerdo". Los dos ediles electos por el partido socialista en Ceuta y el tercero de la candidatura -que no obtuvo escaño- presentaron su dimisión ayer ante la junta electoral. "No estamos de acuerdo con el pacto, es antinatural", justificó Alberto Núñez, cabeza de lista y hasta hace seis días secretario general de los socialistas ceutíes. La renuncia no cayó de sorpresa. El miércoles pasado la ejecutiva local dimitió en bloque en contra del acuerdo.

Pese a las renuncias, la alianza entre el Partido Popular, el PSOE y el Partido Democrático y Social (PDS) -un partido musulmán que deberá sumar sus votos para dar mayoría absoluta- está casi cerrada. Dirigentes del PDS dieron ayer por "garantizado" su apoyo al frente anti-GIL. A cambio, esta formación exige a los populares el cumplimiento de tres reivindicaciones básicas de su electorado: 600 viviendas, un plan de empleo y salario social para los más desfavorecidos.

La relación PP-PDS ya tiene rodaje. Ambos partidos han gobernado en coalición en los últimos tres años junto a otra formación localista a la que el GIL ha borrado del mapa político.

Mientras los socialistas van a regañadientes al pacto, obligados por la resolución del comité federal, los populares no ocultan su satisfacción ante un acuerdo que les permitirá retener la alcaldía pese a haber sido la segunda fuerza.

El PDS también saca ventajas al dar la llave de la gobernabilidad al PP porque según uno de sus dirigentes "sólo un partido de estado puede resolver" los problemas de la ciudad. Desde las filas del GIL se insiste en que es un pacto "contranatura". Antonio Sampietro, el candidato más votado, fue categórico: "Tenemos la mayoría, allá ellos si quieren pactar en contra de la voluntad del pueblo. Cuando vayan a repartirse el pastel no se van a entender. Seremos un partido único fuerte en la oposición contra tres partidos divididos" en el gobierno.

Problemas con IU

Por otra parte, la dirección del PSOE ha advertido de que en algunos ayuntamientos los concejales de Izquierda Unida (IU) no están interpretando bien las consignas y están rechazando el pacto con los socialistas acordado entre las cúpulas de ambas formaciones. El ejemplo más relevante es la localidad burgalesa de Miranda de Ebro. La dirección del PSOE acordó ayer ponerse en contacto con la de IU para comunicar esos incumplimientos y pedir que desde la organización federal se intente convencer a sus agrupaciones locales de la necesidad de buscar mayorías de progreso frente al PP para no repetir lo ocurrido en 1995. En este caso los interlocutores son los responsables de Política Municipal de ambas fuerzas, Alfonso Perales (PSOE) y Francisco Herrera (IU).

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_