El Supremo rechaza por once votos a cinco la recusación que Liaño presentó contra la sala

Una sala especial del Tribunal Supremo rechazó ayer la recusación presentada por el juez de la Audiencia Nacional Javier Gómez de Liaño contra los tres magistrados de la Sala Segunda que tienen que juzgarle por tres delitos de prevaricación, supuestamente cometidos durante la instrucción del caso Sogecable. El Supremo ha rechazado la pretensión de Liaño por extemporánea, es decir, por no haber sido presentada en el momento adecuado, por 11 votos a favor y 5 en contra. El juicio contra el magistrado se celebrará en julio, o a más tardar a mediados de septiembre.

La sala especial del Supremo, integrada por su presidente y los presidentes y los magistrados más antiguos y más modernos de cada una de las salas, ni siquiera tuvieron que entrar en el fondo del asunto. La reunión, que duró buena parte de la mañana, se consumió en el debate de si la recusación fue presentada a destiempo o no. El artículo 223 de la Ley Orgánica del Poder Judicial establece que "la recusación deberá proponerse tan luego como se tenga conocimiento de la causa en que se funde. Si dicho conocimiento fuere anterior al pleito, habrá de proponerse al inicio del mismo, pues en otro caso no se admitirá a trámite".

El juez Gómez de Liaño, procesado por tres delitos de prevaricación, presentó en febrero pasado un escrito por el que recusaba a los tres magistrados del Supremo que deben juzgarle: Gregorio García Ancos, Enrique Bacigalupo y José Manuel Martínez Pereda. Liaño alegaba que los tres magistrados han resuelto recursos durante la instrucción del proceso que se sigue contra él y que por ello están contaminados en su imparcialidad.

El Supremo ha considerado, basándose en el propio escrito de recusación presentado por Liaño, que éste conocía los motivos alegados con bastante anterioridad a la fecha de su presentación. La resolución será redactada en los próximos días por el ponente, el presidente de la Sala de lo Civil, Ignacio Sierra.

Sin entrar en el fondo

La votación obtuvo 11 votos favorables, los del presidente del Supremo, Javier Delgado Barrio, los presidentes de sala Ignacio Sierra, Ángel Rodríguez y Luis Román Puerta (en funciones), y de los magistrados Pedro González Poveda, Xavier O"Callahan, José Antonio Martín Pallín, Joaquín Jiménez, Nicolás Antonio Maurandi, Aurelio Desdentado y Joaquín Samper. Los cinco votos discrepantes correspondieron a los presidentes de las salas de lo social y de lo militar, Luis Gil Suárez y José María Ruiz Jarabo, respectivamente, y los magistrados Pedro Antonio Mateos, José Luis Bermúdez de la Fuente y Carlos García Lozano.

Liaño ya instó en diciembre que los magistrados se apartasen del caso, pero éstos denegaron su pretensión y le indicaron que debía recusarles. El juez de la Audiencia Nacional no lo hizo en ese momento, como exige la ley, sino que ejerció otras acciones legales.

Gómez de Liaño sostenía también en su escrito de recusación que uno de los magistrados, Enrique Bacigalupo, tiene interés en la causa por ser amigo del abogado de la acusación, Antonio González Cuéllar. Pero incluso este dato ya fue publicado por el diario El Mundo en julio de 1998 y el Consejo General del Poder Judicial tuvo que salir al paso y afirmar que el citado diario faltaba a la verdad en sus ataques a Bacigalupo al tiempo que criticaba el intento de "perturbar determinadas actuaciones jurisdiccionales", en clara referencia al proceso a Liaño.

Obviamente también este motivo, sin entrar en el fondo de la cuestión, fue planteado a destiempo.

Escribir demasiado

Fuentes del alto Tribunal comentaron ayer que ha sido el propio escrito de recusación la base de la argumentación para considerar que su presentación es extemporánea. "No se puede escribir tanto", comentó un magistrado. El juez de la Audiencia Nacional, actualmente suspendido de sus funciones, ya recusó con anterioridad a Joaquín Martín Canivell, juez instructor de la causa que se tramita contra él. La recusación también fue rechazada.

Fuentes del Tribunal Supremo señalaron ayer que la Sala Segunda tiene previsto celebrar el juicio contra Gómez de Liaño a mediados de julio o a más tardar a mediados de septiembre, antes de que se jubile José Manuel Martínez Pereda, uno de los magistrados que integran el tribunal, y que precisamente cumple la edad de retiro el 27 de septiembre.

Gómez de Liaño, sin embargo, tiene otros planes. Tras la argucia de recusar a la Sala el 25 de febrero, en la que no debía confiar, el 26 de febrero presentó un artículo de previo pronunciamiento alegando que la causa está juzgada. Anteriormente le fue denegada esta cuestión, pero él la volvió a reproducir por si da resultado.