Una ciudad levantada en... obras

Las obras han florecido en primavera y Jaén se encuentra inundada de enormes huecos que tienen la circulación hecha un desastre. El macroaparcamiento que se está realizando en pleno corazón de la ciudad, en la Plaza de la Constitución, ha provocado tal caos circulatorio que sólo hace falta darse una vuelta por la zona para escuchar los más variados improperios de los ciudadanos. Las señales que se han situado en los accesos a Jaén -"evite el centro"-, más parecen carteles electorales con mala intención que una advertencia para los conductores, que hacen caso omiso a la recomendación por las alternativas poco claras que se ofertan. Ésta es la imagen de la ciudad de hoy, que se complementa con las continuas zanjas abiertas a los lados de las calles para introducir la fibra óptica o el gas natural. Lo que no ha conseguido Jaén en estos años es la atracción de empresas, algo que sí han logrado otros municipios de la provincia. En esta legislatura se han iniciado los trámites para construir un nuevo polígono, que ya se ha quedado pequeño, según Juan Torres, candidato del PSOE, por la reserva de suelo que ha hecho Campofrío para sus nuevas instalaciones tras la adquisición de Molina. Así, Jaén se mantiene como una ciudad de servicios Las obras han sido parte central del debate en la legislatura que ahora acaba. Una de las mayores pugnas urbanísticas entre el Ayuntamiento, gobernado por el PP, y la Junta se ha situado en el campo de fútbol de La Victoria. El alcalde, Alfonso Sánchez Herrera, apostó por ofrecer ese suelo para la construcción de viviendas y un centro comercial, a cambio de que la empresa que explotase el terreno, situado en pleno centro de la ciudad, construyese un nuevo campo de fútbol. Los socialistas se pusieron de uñas. La Junta ofreció asumir el coste de la obra a cambio de recibir del municipio suelo público en el que construir viviendas. Con esta fórmula la Junta volverá a ingresar el dinero que tendrá que desembolsar por el nuevo campo, aunque tendrá que esperar más tiempo para ver el beneficio. No sin disgusto, el PP aceptó el ofrecimiento y ya se ha puesto la primera piedra, lo que supondrá dejar el campo de La Victoria como zona verde y de ocio. Otra decisión ha enfrentado radicalmente al alcalde con la oposición ha sido la privatización del agua. FCC obtuvo la concesión por 70 años a cambio de 1.300 millones de pesetas. PSOE e IU han cuestionado el proceso mediante el que consiguió la concesión la misma empresa que ya tenía la recogida de basuras y la limpieza. Falta de transparencia y una baremación inadecuada de las empresas que se presentaron han levantado las sospechas. Seragua, nombre de la filial de FCC que ya controla el servicio, no ha entrado con buen pie. Empezó emitiendo recibos con grandes subidas al facturar conjuntamente más de tres meses de consumo, lo que disparaba la cuantía a pagar. Además, molestan los continuos descensos de presión por la noche en los últimos días. Se están llenando las piscinas, se justifica la empresa. Más conflictos han surgido con la expansión de la ciudad hacia el norte: Hay empresas que se niegan a ser desalojadas para que se construyan nuevas urbanizaciones; hay quejas de propietarios de nuevos edificios por la falta de urbanización de las calles y acusaciones de "amiguismo" del PSOE. Sánchez Herrera defiende su gestión: 160 actuaciones en calles y plazas. El nuevo candidato del PP a la alcaldía, Miguel Sánchez de Alcázar, añade que en cuatro años se han invertido 10.000 millones de pesetas. IU propugna"una ciudad habitable" y más ecológica con la actuación en el casco antiguo, un mayor control sobre los servicios públicos privatizados. El PSOE quiere un modelo de ciudad en el que se cuente con la opinión de los colectivos sociales, se apueste por las zonas verdes y en el que se consiga que la antigua prisión provincial deje de ser un edificio abandonado para que se convierta en Museo Internacional de Arte Ibero, asunto en el que va de la mano con Diputación y la Junta de Andalucía. El casco antiguo sigue siendo la asignatura pendiente de Jaén. En esta legislatura se han hecho actuaciones puntuales, pero no se ha realizado una actuación de mejora global de un barrio que se está despoblando lentamente, que se encuentra repleto de pequeñas y estrechas callejuelas en las que se encuentra la historia de la ciudad.

"Jaén no ha conseguido atraer empresas, algo que sí han logrado otros municipios"