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Reportaje:

GANDIA (LA SAFOR) Una apuesta por la modernización

Gandia estrena una nueva imagen. La peatonalización del centro histórico ha culminado un proyecto que se inició con el Plan de Renovación Urbana (PRU) y tuvo su empujón definitivo con la lluvia de millones, un total de 3.500, que recibió en 1995 del Banco Europeo de Inversiones para actuaciones en los barrios degradados y restauración de monumentos históricos. El casco antiguo ha acabado de tejer su idiosincrasia como núcleo comercial, cívico y de servicios no sólo de la ciudad, sino de toda su área de influencia en La Safor. Gandia aspira además a ser "centro de atracción cultural" en la comarca, y bajo esta premisa ha apostado por la recuperación del patrimonio histórico-artístico que jalona el centro urbano. Tras la experiencia en el Palau dels Borja, gracias al convenio entre el Consistorio y la orden jesuita, propietaria del edificio, el Ayuntamiento rehabilita ahora la Casa del marqués de González Quirós como futuro centro social y cultural. De reciente inauguración son también las Escuelas Pías, sede de la antigua universidad de Gandia fundada por el duque Francisco de Borja, que alberga los estudios de la Universidad Nacional de Educación a Distancia y la Escuela Permanente para Adultos. Pero ha sido la apertura de la ronda de circunvalación de la N-332, Valencia-Alicante, una de las obras más significativas, aunque no exenta de polémica. El nuevo tramo ha librado al municipio del discurrir diario de cerca de 40.000 vehículos en dirección al corredor litoral o a la carretera comarcal de Albaida. Una solución parcial y localista, vista con recelo por las poblaciones vecinas, Bellreguard, L"Alqueria de la Comtessa y Oliva, ya que traslada el caos circulatorio a estos municipios e hipoteca la posibilidad de una alternativa comarcal. El enfrentamiento entre el Ayuntamiento, gobernado por el PSPV tras pactar con UV y EU, después NE, y el gobierno autónomo gobernado por el PP ha sido la nota dominante de este último mandato. Los socialistas, con Josefa Frau como cabeza visible en la alcaldía, han denunciado de forma reiterada que el PP en la Administración central y autonómica ha bloqueado los principales proyectos de la ciudad en los últimos cuatro años. El más importante: la renovación de la fachada marítima. Un ambicioso plan, estimado en 2.600 millones, con el que el municipio pretende entrar en el nuevo siglo con una imagen modernizada. El cambio de gobierno en las elecciones generales de 1996 supuso el bloqueo de los principales convenios que Obras Públicas firmó en la etapa socialista. El Ayuntamiento se vio obligado a adecuarse a las nuevas exigencias de los populares en el Ministerio de Medio Ambiente y a cambiar el proyecto de la línea marítima en varias ocasiones. Finalmente, en marzo, y a tres meses de las elecciones, la obra consiguió el beneplácito ministerial y se espera que sea realidad en el 2003. El municipio gandiense se encuentra además en plena ebullición demográfica. De los 58.000 habitantes censados en 1995 ha pasado a conseguir superar el listón de los 60.000. La ciudad busca ahora una nueva expansión urbanística hacia la playa que acabe con la barrera espacial que separa la costa del centro urbano. Pero el nuevo reto de Gandia es desempeñar un papel protagonista como centro de servicios y ocio en el nuevo orden territorial que marca la creación del consorcio de las Comarcas Centrales Valencianas. Una reivindicación que las dos principales fuerzas políticas locales, el PSPV-NE y el PP, han coincidido en incluir en sus programas electorales para los próximos comicios municipales. Entre estos dos partidos se disputará la alcaldía el próximo 13 de junio.

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