Detenidos tres niños que conducían un coche contra dirección en la A-16

Tres menores protagonizaron en la madrugada del domingo una escena digna de alguna de las películas de José Antonio de la Loma que inmortalizaron a delincuentes juveniles como El Vaquilla y El Torete. Los tres chavales, con edades comprendidas entre los 11 y los 14 años, condujeron un vehículo robado perseguidos por la policía a lo largo de más de 20 kilómetros, entre Barcelona y Sitges. Y no sólo eso: la mayoría del trayecto, a lo largo de la autopista A-16, lo hicieron en dirección contraria. Los agentes del Cuerpo Nacional de la Policía y de la Guardia Civil no consiguieron detenerlos hasta que el turismo que conducían los jóvenes tuvo una colisión lateral y topó con otros tres vehículos. La persecución empezó en la ciudad de Barcelona. Cerca de las cinco de la madrugada, un coche patrulla observó como un vehículo, marca Opel Corsa, ocupado por tres personas circulaba de manera temeraria por los alrededores de la plaza de España. Los agentes de policía le dieron el alto con señales luminosas y el coche, lejos de detenerse, aceleró a gran velocidad iniciando la huida. El vehículo sospechoso, con el coche patrulla pisándole los talones muy de cerca, se dirigió hacia la autovía de Castelldefels. A la altura del término municipal de Sant Boi de Llobregat, el automóvil ocupado por los tres menores, que había sido robado en la localidad cercana de El Prat -en donde residen los presuntos delincuentes- realizó una maniobra brusca y accedió a la autopista A-16 en dirección contraria. Sin heridos La persecución duró varios kilómetros, hasta que a la salida de los túneles del Garraf, los menores perdieron el control del coche, que topó con el guardarraíl lateral de la vía y después con otros tres vehículos. Fue entonces cuando la Guardia Civil, alertada previamente por el Cuerpo Nacional de Policía, detuvo finalmente a los tres emuladores de El Vaquilla. Los menores resultaron con contusiones leves, mientras que ninguno de los ocupantes de los otros vehículos que frenaron involuntariamente su carrera resultó herido. Tras ser atendidos en un hospital cercano, los tres chavales volvieron a sus respectivos domicilios y ahora están a la espera de ser citados a declarar por el juez, que ha abierto las diligencias oportunas por el rocambolesco suceso.